
Mirad sin miedo
La tercera parte del reportaje sobre Rockstar y el cine se centra en The Warriors
La película fetiche de los hermanos Houser que acabó convirtiéndose en uno de los juegos más especiales del estudio de GTA.
La película fetiche de los hermanos Houser que acabó convirtiéndose en uno de los juegos más especiales del estudio de GTA.
Andrew Halabourda tarda poco más de hora y media en terminar la primera aventura del Jefe Maestro. En legendario, claro. Legendario o mierda.
Tiempos convulsos para la estabilidad corporativa. Parece que a varios ejecutivos de alto nivel les ha pasado factura el sprint para traernos la next-gen, y si el otro día Jack Tretton decía adiós con la manita, hoy es el jefe de producto de Xbox, Marc Whitten, quien se tira de la cubierta del barco. Whitten llevaba en Microsoft desde 2000 y fue determinante tanto en el nacimiento de las tres consolas que ha dado a luz la compañía, como en el asentamiento de Xbox Live como plataforma de distribución digital y de juego online. Ahora su destino profesional parece que está en Sonos, una marca de sistemas de sonido sin cables para el salón donde seguramente trabajará con menos presión. Así se despedía Whitten, que será sustituido en la charla sobre los indies en Xbox que debía dar el próximo viernes en la GDC por Phil Spencer, en un comunicado oficial:
Corren tiempos difíciles para Microsoft. El principio de una nueva generación de hardware siempre es duro, seas quien seas, pero aquí las dudas vienen de dentro. No son pocas las voces de altos cargos de la compañía que no están muy seguros de la viabilidad de seguir manteniendo la marca Xbox y sobre todo de si fue o no conveniente introducirse en este mercado con la Xbox original que tanto dinero les hizo perder en primer lugar. Ahora Steve Ballmer, CEO de Microsoft hasta hace cuatro días, dice que todo fue cosa suya:
La estupenda obra fotográfica de Brandon Allen.
En los últimos meses se ha sugerido en varios medios que Microsoft podría estar planteándose la idea de vender su división Xbox de videojuegos. La razón es simple: es un jodido agujero negro que come más dinero cada día. Dicen que el balance de pérdidas es mareante y que incluso a un gigante corporativo de presupuesto virtualmente ilimitado le está escociendo mucho el asunto. Las cifras de las que habla Business Insider son desde luego una puta locura: entre Xbox, móviles y Skype, Microsoft estaría perdiendo alrededor de 2.500 millones de dólares, y 2.000 serían directamente atribuibles a su departamento de videojuegos. Poca broma.
En Edge parece que se han decidido por el acoso y derribo de Microsoft, o quizá es que su posicionamiento editorial es un poco radical, pero el caso es que si el otro día publicaban la portada de su nuevo número diciendo «PS4: tu próxima consola» y dedicaban un reportaje a decir por qué el nuevo vídeo VHS es mejor que el próximo vídeo VHS de Microsoft, hoy ya tiran de hemeroteca para sacar datos curiosísimos que quizá muchos desconozcáis.
Hace poco IGN estuvo hablando con Joachim Kempin, un tipo que estuvo algo más de 20 años al servicio de Microsoft ejerciendo de vicepresidente en el área de ventas, y no sé se fue por entrevistarle en la sobremesa con el estómago lleno y el carajillo subiendo o si lo que dice es realmente cierto. El caso es que el amiguete Kempin asegura que Microsoft entró en el mercado consolero con la sola intención de tocarle los huevos a Sony:
Jade Empire, ¡qué días! Anda que no ha llovido de eso, nanos. El RPG oriental de BioWare, que salió en 2005 en exclusiva para Xbox, la primera, es un nombre en el que los jugadores han volcado siempre su cariño y pasión incodicionales. En la Eurogamer Expo, las buenas gentes de nuestra web hermana han podido hablar con Ray Muzyka y Greg Zeschuk, que les han dicho que «es una franquicia cercana y querida para nosotros».
Bizarre Creations anunció su cierre definitivo hace unos días.