Joyita inesperada

Ender Lilies:
Quietus of the Knights

El primer título de Binary Haze Interactive es un excelente ejemplo de su género. Un juego repleto de secretos donde combate y exploración se reparten el protagonismo.

Una luz rosada nos despierta en la oscuridad. Estamos en un altar subterráneo y no tenemos recuerdos sobre nuestro pasado. La luz se materializa ante nosotros. Es un caballero encapuchado de aspecto fantasmagórico. Él será nuestro guía y, literalmente, nuestra espada en el viaje que estamos a punto de emprender. Un viaje que nos llevará a recorrer Finisterra, un reino asolado por una terrible plaga que ha convertido a sus habitantes en criaturas deformes y violentas. Somos la última doncella blanca que queda con vida. La última capaz de purificar esa corrupción. Parece una tarea demasiado difícil para una simple niña, pero no estaremos solos. Como el caballero, numerosos espíritus guardianes nos prestarán su apoyo por el camino y nos dejarán usar sus poderes y habilidades para acabar con la infección.

Así son los primeros pasos en Ender Lilies: Quietus of the Knights, desarrollado por Adglobe y Live Wire, editado por Binary Haze Interactive. Se trata de un título de acción y exploración en dos dimensiones (un metroidvania de manual) ambientado en un mundo de espada y magia. Un cuento de hadas retorcido, bello y terrorífico al mismo tiempo. Empezamos esta historia en la oscuridad, en la ignorancia. Poco a poco vamos viendo la luz y se va desvelando ante nuestros ojos el trágico destino del reino y de sus personajes. Como ocurre a menudo, el conocimiento está reñido con la felicidad.

De forma habitual en el género, nuestra aventura comienza con un personaje prácticamente sin habilidades. De hecho, en los primeros compases del juego los movimientos de Lily, la doncella, son incluso torpes. Nuestro objetivo es avanzar en la exploración del mundo, derrotar a jefes y mejorar a ese avatar. Esas mejoras no sólo harán que seamos cada vez más fuertes, sino que también nos permitirán llegar a zonas del escenario antes inaccesibles. En este caso, esos upgrades tienen que ver, principalmente, con los espíritus que nos acompañan, protagonistas todos ellos de la caída de Finisterra y con numerosas cuentas pendientes y esqueletos en el armario. Tras derrotarlos y purificarlos, conoceremos retazos de su trágico pasado, ligado íntimamente al del reino, y podremos usar sus habilidades para combatir. En el uso y la combinación de esas habilidades está la mecánica estrella del juego. Algunos de esos espíritus atacan cuerpo a cuerpo y otros a distancia; unos tienen ataques infinitos mientras que otros tienen un número determinado de acciones; hay ataques rápidos que combinan combos largos mientras que otros golpean un par de veces, pero de forma demoledora.

Podremos elegir hasta a seis espíritus para que nos acompañen en cada momento. De los cuatro botones de acción principales, uno queda relegado al salto, mientras que a los otros tres les asignaremos uno de estos espíritus. Con R (en el caso de Switch) alternaremos entre dos conjuntos diferentes de ayudantes. Saber elegir la alineación adecuada para cada momento es clave, sobre todo a la hora de enfrentarse a los jefes. El problema es que únicamente podremos variar esas alineaciones al descansar en los puntos de guardado. Lo mismo se aplica a las reliquias que encontramos por el mundo y que nos dan algunas ventajas: más vida, menor daño recibido, mayor ataque en ciertas circunstancias, etc. Como los charms de Hollow Knight, además de obtener nuevas reliquias, será clave disponer de nuevas ranuras en las que equiparlas.

Además de los espíritus y las reliquias, hay otros dos factores que marcarán el desarrollo de nuestro personaje en Ender Lilies. Por un lado, los puntos de experiencia que vamos acumulando al derrotar a enemigos y que nos permitirán subir de nivel. Por el otro, la posibilidad de mejorar a nuestros espíritus aliados encontrando determinados materiales. De nuevo, aquí entra en acción un cierto componente estratégico porque esos materiales no son excesivamente abundantes y hay que elegir qué espíritus mejoramos y cuáles no. Las mejoras suelen implicar siempre un mayor poder de ataque, pero también movimientos adicional en los combos, mayor número de proyectiles para quienes atacan a distancia o un mayor alcance.

Como en todos los metroidvanias, el desplazamiento por el mapa y la información que éste nos proporciona son claves en la jugabilidad. El mapa de Ender Lilies es quizá su mayor punto débil. Da poca información visual para orientarse ya que las diferentes zonas se representan con simples polígonos donde no aparece ningún hito que nos sirva de referencia. No permite marcar determinados puntos para volver a ellos más adelante y ni siquiera diferencia entre una zona y otra. Su única redención, que no es poca, radica en decirnos claramente en cada sala si ya hemos encontrado todos los secretos que oculta o no.

El juego ofrece, prácticamente desde el principio, un sistema de viaje rápido entre puntos de guardado. Unos puntos de guardado que, si bien recuperarán nuestra vida y recargarán los ataques de nuestros espíritus, también revivirán a todos los enemigos que hayamos derrotado previamente, al estilo de las hogueras de los Souls. Enemigos, por cierto, que son uno de los grandes aciertos del título por su número, su variedad y el equilibrio de su dificultad. Por seguir enlazando temas, el de la dificultad es uno que merece la pena tratar. Ender Lilies no es un juego fácil, pero está lejos de la dificultad de otros metroidvanias recientes. Puede terminarse en alrededor de 20-25 horas, en función de lo completista que se sea y del final (hay tres diferentes) que queramos obtener. Aaunque algún jefe puede atragantarse, nunca da la sensación de que el juego sea injusto con el jugador. Además, morir no tiene mayor penalización que la de volver al punto de guardado más cercano.

Su aspecto visual y música son, sin duda, una de las fortalezas de Ender Lilies. El diseño de personajes y enemigos tiene mucha personalidad. Los escenarios, aunque casi siempre en tonos apagados, son suficientemente variados y diferentes entre sí, con muchos detalles en movimiento y una sensación de tridimensionalidad muy bien conseguida. Desde catedrales a castillos, pasando por catacumbas, pantanos y osarios. Todas esas ubicaciones van acompañadas de la música del grupo japonés Mili que consigue dar un toque melancólico a nuestros desplazamientos gracias, sobre todo, a bellas melodías al piano y, en ocasiones, algunos acompañamientos vocales. Harmonious, una de las pistas más paradigmáticas de su banda sonora, permite hacerse una idea de ese tono de tristeza que se le ha querido dar al juego. Un tono que muta por completo en los enfrentamientos contra jefes, donde se deja de lado el piano y encontramos combinaciones de sonidos clásicos y música electrónica que acompañan nuestro inevitable aumento de pulsaciones.

Ender Lilies: Quietus of the Knights no pretende revolucionar un género que en los últimos años parece haber resurgido gracias a exponentes de una altísima calidad. De hecho, sus referencias son muy evidentes y afectan tanto al argumento y tono del juego como a sus mecánicas jugables. Sin embargo, el producto final es mucho mejor que la suma de esos préstamos. Estamos ante un juego muy, muy sólido, bonito de ver, agradable de jugar y, por encima de todo eso, extremadamente equilibrado en los retos que plantea y las recompensas que da al jugador. Para mí, sin duda, una de las grandes sorpresas de lo que llevamos de año.

[ 9 ]

  1. gamusino

    me alegro que haya salido bien este juego, que hace tiempo lo vi y me llamó bastante la atención! 😀

  2. El Jugador Medio

    Ojalá en Vita. Pues me lo apunto muy fuerte, que parece que se confirma la pintaza que tiene.

  3. Corrupt

    ¿Qué tal tira en Nintendo Esgüich?

    1. Christian Olivares

      @corrupt
      Perfecto. Además, es juego de portátil.

  4. BobDolan

    Me lo apunto. Sólo espero que no sea demasiado souls

    1. Christian Olivares

      @bobdolan
      No, para nada. No es tan difícil.

      1. BobDolan

        @christian
        Perfecto, gracias!

  5. Gorka con K

    A mi me está encantando. Es verdad que el mapa es un poco lioso y prefiero el tipo de mapa Blasphemous, para no estar tan perdido pero por lo demás, un gran juego que se le ha dado poco bombo…como tantos otros…

  6. nakuto

    Lo empecé la semana pasada aprovechando que ha salido en físico en Japón y desde luego que la nota que se ha llevado en el análisis es totalmente merecida. De los mejores juegos del «género» que he probado en los últimos años.

    La jugabilidad, el arte y la música están a un nivel muy muy alto. No dejéis pasar la oportunidad de probarlo.