Rojo y negro

La sangre tiene más sentido de lo que parece en STRAFE

Devolver Digital y Pixel Titans han publicado un nuevo tráiler en el que se muestra el sistema que han desarrollado para generar la sangre en STRAFE, su FPS noventero y poligonal; sacad el paraguas y ved el vídeo encima de estas líneas.

Ya en los tráilers anteriores se veían buenas ideas, y este viene a confirmar que hay algo más detrás de este regreso a los 90 que pura confianza en que las cosas eran mejor entonces. En la nota de prensa se comentan varias de las funciones que cumple la sangre en STRAFE, algo a lo que el equipo de desarrollo «ha dedicado mucho tiempo» porque, «como todos sabemos, los jugadores necesitan dejar su huella en un nivel». 

La más sencilla es servir para que el jugador «se pueda deleitar en el increíble estropicio que han montado con la seguridad de saber que cada mancha de sangre representa un desafío superado». También sirve de guía para moverse por los niveles «completamente generados al azar» de STRAFE: «un camino de sangre y destrucción también es una herramienta útil para saber dónde has estado».

Por último, se habla de las «nuevas posibilidades» que les abre tener un sistema de gore persistente y avanzado. Un ejemplo son los enemigos que sangran ácido «que quema al jugador» si se para sobre un charco de su sangre. Casi suena a Splatoon cuando recomiendan evitar estos charcos de sangre ácida «a toda costa, o cúbrelos con la sangre de otro enemigo para crear un camino seguro». You’re a kid now, you’re John Romero now.

STRAFE se publica en ordenadores y PS4 a principios de 2017.

  1. StJ

    Ya sé que se vende como un retro-FPS, pero no, Strafe es un giro del género, no un regreso (cosa que celebro, por otra parte)

  2. pabliter

    Todo el mundo debería jugar a este juego.

  3. SenyoretaYamabuki

    Vi el trailer este el otro día y me flipé bastante. Muchas ganas.

  4. Mominito

    Todo lo que ellos quieran y más, pero esto es una mojona.

    Como el juego sea genérico con este bonus, yo al menos estoy fuera.