EA Play Live 2020: Electronic Arts se queda en el banquillo

No hace falta volver a repasar los tropiezos de Electonic Arts durante los últimos años, las polémicas y las decepciones relacionadas con varios de sus lanzamientos más o menos recientes. Ya está, ya pasó. Qué le vamos a hacer. Ahora toca pensar en la remontada. ¿El problema? Absolutamente nadie, a juzgar por los comentarios en redes sociales previos a la emisión de esta madrugada, se atrevía a esperar eso del EA Play Live.

No ha habido grandes sorpresas, ni en ese sentido ni en ningún otro. Solo el anuncio de un nuevo Skate habrá puesto a algunos en pie, aunque lo suyo es que esperen sentados; fue una sorpresa final a la desesperada que no se acompañó de logos ni de bocetos, así que la cosa va para largo.

Como mínimo no ha durado tres horas. Para los que recordamos el experimento de 2019 –esos seis vídeos para seis juegos dentro de un evento que, lo decía Víctor, «no era para fans de EA, sino para seguidores de cada una de esas franquicias»–, los cincuenta minutos de la presentación de hoy han sido una buena noticia.

El primero en salir ha sido Apex Legends, que en otoño llegará a Steam y a Nintendo Switch. Será también entonces cuando se habilite el juego cruzado entre todas las plataformas, aunque no se ha dicho nada sobre posibles mejoras en PS5 y Xbox Series X.

Y por si no quedó claro la semana pasada, con Battlefield V, Battlefront II, ya no hay dudas sobre la apuesta de EA por la tienda digital de Valve. Desde hoy están disponibles varios más –Dead Space 3, Titanfall 2 o Los Sims 4, por ejemplo– y tanto FIFA 21 como Star Wars: Squadrons se publicarán el mismo día que en Origin.

La parte de EA Originals ha quedado relativamente fresca, a pesar de lo forzado que resulta exprimir al personaje de Josef Fares tres años después de su «Fuck the Oscar!» –han recuperado la escena con pitido y peineta pixelada. El tío nos ha contado su vida, literalmente, pero ha enseñado poquito de It Takes Two, una nueva aventura cooperativa que saldrá en 2021. Los de Zoink! sí habían preparado un tráiler de Lost in Random. El mejor del EA Play, en mi opinión: me ha recordado a American McGee, a la Double Fine de Psychonauts e incluso a Media Molecule.

Rocket Arena, la novedad dentro del sello para no-tan-indies, es uno de disparos tres contra tres con más cohetes que otra cosa. Saldrá el 14 de julio y se ve simpático, pero a 29,99€ le puede pasar lo mismo que al último y olvidadísimo Plants vs. Zombies. Curiosamente, en Steam está todavía la ficha de cuando lo iba a publicar Nexon como free to play.

Llegó después Star Wars: Squadron, que se había anunciado oficialmente días antes y del que se había prometido gameplay. Lo hubo y me gustó: más allá de la estética peliculera y de la compatibilidad con realidad virtual, parece que coloca varios elementos interesantes en la cabina de las X-Wing y compañía. No creo que se le puedan poner muchas pegas de momento, a pesar de que ya había combates espaciales en Battlefront II y de las dudas sobre la monetización –si hay un Baby Yoda en Los Sims, cómo no esperar aquí un muñequito para el salpicadero. Sin embargo, y por injusto que suene, cuesta aceptar que un juego de naves pueda ser el protagonista de una conferencia así. Con o sin E3.

Hacía falta trabajo en equipo, pero FIFA 21 y Madden 21 pusieron muy poco de su parte. Se mostraron juntos y revueltos en un vídeo más preocupado por las aficiones y los cánticos que por los gráficos next-gen de EA Sports. Ambas entregas ofrecen Dual Entitlement, ese Smart Delivery con asterisco para pasar de PS4 a PS5 o de Xbox One a Series X.

Y a partir de aquí, control de daños. Laura Miele, Directora de Estudios, dijo que no podían esperar a junio de 2021 para mostrar algunos proyectos de nueva generación: que si un par de coches sacados del Need for Speed de Criterion, que si unos entornos con pinta de Dragon Age 4, que si unas pruebas técnicas del próximo Battlefield. Nada muy tangible por ahora, pero ahí están DICE y BioWare; ahí está, sobre todo, la posibilidad de un punto y aparte. No será este año, más complicado que importante para EA y otras muchas, pero a ese work in progress nos aferramos.

De momento, por extraño que resulte, uno tiene la sensación de que Electronic Arts no está. El año que viene, supongo, habrá que decidir si se la espera.