
Bueno, te lo voy a decir. Mira, el amigo soy yo
El Palacio Sangriento es el motivo por el que tu amigo el pesado insiste en que juegues a Devil May Cry 5
Sin alardes ni sorpresas, el clásico modo de juego llega a la nueva entrega como recordatorio de todas las virtudes (y flaquezas) del hack and slash.