Goku, sálvanos

El descalabro de Jujutsu Kaisen Cursed Clash

Malas noticias para Bandai Namco en su último informe financiero, no ha sido el mejor año para la compañía; el siguiente mejorará gracias a Tekken 8 y sus 2 millones de ventas en menos de un mes, una forma idónea de salvar el trimestre. Las peleas de la familia Mishima/Kazama son la cara de la moneda, mientras que la cruz la representa Jujutsu Kaisen Cursed Clash. Este juego multiplataforma desarrollado por Byking Inc. se ha desvanecido ante nuestros ojos: Fue publicado hace dos semanas (el 2 de febrero) y tenía como garantía la opción de aprovechar la inmensa ola de interés que suscita esta obra ahora mismo.

Parece que el estudio no ha estado a la altura de lo que demandaba la licencia. Jujutsu Kaisen es uno de los animes del momento después de dos temporadas y una película, una de esas series con un gran calado entre los fans de este tipo de contenido, pero también una de esas obras que consigue traspasar la barrera de su público objetivo y atraer a nuevas audiencias; como sucedió hace una década con la emisión de Shingeki no Kyojin (Ataque a los titanes), por ejemplo.

Jujutsu Kaisen Cursed Clash tenía los ingredientes necesarios para satisfacer a quienes esperaban un juego de lucha con estos personajes, ya que el elenco base del juego era lo suficientemente amplio como para generar interés. Además, la promoción del mismo hizo el suficiente ruido como para que no nos olvidáramos de él; no se limitaron a presentar a los personajes —presentaciones en grupo eso sí, hacer vídeos individuales es algo que pueden soportar (sin llegar a generar el efecto contrario) franquicias con más recorrido como Tekken—, también aprovecharon a uno de sus personajes más queridos para crear material como este:

Los jugadores concurrentes no suponen un dato definitivo, pero sí que son un indicador útil para medir el interés que despierta un juego en un momento determinado. Más allá de los casos extremos como Palworld, estas semanas hemos visto cómo se celebraba la buena acogida en Steam de Like a Dragon: Infinite Wealth o Persona 3 Reload, por no hablar del gran rendimiento de Helldivers 2 en este sentido.

Jujutsu Kaisen Cursed Clash llegó a reunir en su primer día en Steam a más de 5.200 jugadores concurrentes, pero desde el 6 de febrero no supera el millar y durante los últimos días no alcanza ni 300. Tampoco le han acompañado las valoraciones de la prensa; no llega siquiera al aprobado en Metacritic y los medios que suben la media no pierden la oportunidad de señalar la falta de cariño hacia la obra original.

Estos días corría el rumor de que hasta 100.000 personas habían solicitado el reembolso tras adquirir este juego, aunque las únicas fuentes que lo señalan son creadores de contenido relacionados con anime. Difícil imaginar tantas unidades vendidas si atendemos a los jugadores concurrentes del primer día, pero saldremos de dudas en el próximo informe financiero de Bandai Namco.

Es una pena que manganimes muy seguidos durante estos años no hayan logrado dar el salto al videojuego con una adaptación a la altura: One-Punch Man tuvo en 2019 One-Punch Man: A Hero Nobody Knows de la mano de Bandai Namco, Koei Tecmo publicó dos juegos de Shingeki no Kyojin (Attack on Titan Wings of Freedom en 2016 y Attack on Titan 2 en 2018) y Boku no Hero Academia tuvo una adaptación al videojuego el año pasado llamada My Hero Ultra Rumble que no aterrizó con buen pie. Este battle royale gratuito también lo desarrolló Byking Inc., como Jujutsu Kaisen Cursed Clash.

Quizá de estos éxitos recientes el que mejor parado ha salido ha sido Kimetsu no Yaiba, ya que el juego de CyberConnect2 Guardianes de la Noche: Las Crónicas de Hinokami sí recibió muy buenas valoraciones tanto de la prensa como de los usuarios en plataformas como Steam.

No todos los manganimes gozan del público (y la atención) de los grandes nombres, como pueden ser One Piece, Dragon Ball o Naruto, pero ojalá los fenómenos que surjan durante los próximos años dentro del shonen se parezcan más a videojuegos como One Piece: Round The Land —la saga One Piece Pirate Warriors es la respuesta fácil, ¡pero no la correcta!—, la saga Naruto: Ultimate Ninja o Dragon Ball FighterZ.

El fracaso de Jujutsu Kaisen Cursed Clash sólo sirve para que otras adaptaciones cercanas como Hunter x Hunter Nen x Impact generen más preocupación que ilusión. Por suerte, siempre nos quedará Goku; confiemos en Dragon Ball: Sparking! Zero.

Graduado en Periodismo y Comunicación Audiovisual por la universidad de lo de Cifuentes, Juan es una de las voces de NAT Moderada y ha colaborado en medios como BreakFast, Desayuno Continental y Cocinando Fandoms. Observador nato, le encantan los gatos y si algún día ves que te mira intensamente es porque quiere grabar un podcast contigo.

  1. Takizawa

    Uno de los principales problemas que veo a Bandai Namco como desarrolladora es la incompetencia de crear buenos títulos con las franquicias y licencias que tiene bajo su poder.
    Mi mayor decepción para con ellos fue con el J-Stars Victory Vs, teniendo tanto potencial hicieron un juego del montón, aburrido y sin alma.
    Luego tenemos los miles de juegos de Dragon Ball, ¿alguien sigue jugando Dragon Ball: The Breakers?… ¿alguien recuerda ese juego?
    Gundam Evolution es otro caso a la lista de juegos que se pierde en la lista.

    Genshin Impact les movió el piso a los desarrolladores japoneses y hasta el momento no han sabido reaccionar…¿Blue Protocol fue la respuesta de Bandai?… Bueno, el tiempo solo hizo notar la inoperancia de esta empresa que solo puede vivir bien como publisher.