David Jaffe y sus desafortunadas figuras retóricas

David Jaffe no es sólo el padre del primer God of War y el hermano gemelo del muy perjudicado Edward Furlong, también es un inquieto treintañero cuya tendencia a decir estupideces suele darle más titulares que su propio trabajo. La última ha sido digna de un mal imitador de Cliffy B., y es que el amiguito Jaffe tuvo la brillante idea de hacer un símil entre el hardware recién horneado (en este caso la recientemente oficializada NGP a.k.a. PSP2) y lo que vendría a ser una vagina:

Me gusta la NGP por lo que he visto hasta ahora. ¡Quiero una! Un nuevo hardware es como un chochito fresco. Es emocionante al principio pero después de unos años de experiencia con una nueva vagina —a pesar de que siempre sigue habiendo cierto punto emocionante cuando llega algo nuevo— te das cuenta de que tarde o temprano lo nuevo y excitante se convertirá en el estándar, así que lo mejor es mantenerse concentrado y agradecido con lo que tienes en estos momentos, y si necesitas un cambio, ya llegará de forma natural.

Sabiendo cómo las gastan al otro lado del charco con este tipo de declaraciones, sorprende que David haya sido tan imprudente, por usar un término poco ofensivo ((Al contrario que memo, por ejemplo.)). El caso es que las acusaciones de sexista no se han hecho esperar, y el pobre hombre ha tenido que salir en su propia defensa:

Soy intencionadamente grosero y lascivo a veces porque creo que hay demasiados hipócritas mojigatos. ¿Pero sexista? En absoluto. Hay una GRAN GRAN GRAN diferencia entre usar un término vulgar para referirme a la vagina y usar palabrería malintencionada como tirar de ‘gay’ como insulto, decir ‘bitches’ [NdT: zorras] (algo que me advirtió un usuario de Destructoid y dejé de hacer) o usar la palabra que empieza por ‘N’ [NdT: ¿nigger?]. Sobre las demandas por ser vulgar: si CUALQUIER en mi compañía me dijese que no les gusta y que debería dejar de hacerlo, lo haría de inmediato. De cualquier modo, nadie me ha dicho nada —ni hombres ni mujeres—, así que no se me ha ocurrido. Pero respeto demasiado el puesto de trabajo y los talentos del equipo para perderles por ser un poco guarrete de vez en cuando.