Tren de la VR-uja

Análisis de Until Dawn: Rush of Blood

La primera vez que Sony y Supermassive Games mostraron Until Dawn, en la gamescom de 2012, aquello era un juego de PS3 compatible con PlayStation Move. Ahora, cosas de la vida —llámalo efecto mariposa, llámalo realidad virtual—, la franquicia se reencuentra con el control gestual; a Rush of Blood, mitad tren de la bruja, mitad galería de tiro, lo suyo es montarse con un Move en cada mano. La opción de jugar con el mando es tan incómoda que no merece la pena tenerla en cuenta.

Como buen producto de las circunstancias, Until Dawn: Rush of Blood parece moderadamente obvio: tocaba hacer un juego de miedo para PlayStation VR, porque los sustos lo son un poco más cuando llevas las gafas. Y para evitar problemas y mareos con los desplazamientos, mejor que sea sobre raíles. Pero si el movimiento es automático, algo habrá que hacer. Pegar unos tiros, por ejemplo. Las pistolas aparecen al final en mi reconstrucción de los hechos porque, en importancia, solo están por encima del guion: la excusa para llamarlo Until Dawn es una conexión poco elaborada, que se cuela de forma algo forzada por el único espacio que le dejaba la aventura original.

Análisis de Until Dawn: Rush of Blood

De nuevo, el extra de inmersión que ofrece la realidad virtual eleva hasta lo destacable una serie de momentos, detalles y situaciones que vistos en la tele no serían gran cosa. Los pasillos estrechos y oscuros agobian por encima de sus posibilidades, los descensos en plan montaña rusa pueden llegar a notarse en el estómago y los jump scares facilones, cada vez que se apagan las luces, te los comes por mucho que se vean venir. El miedo en Rush of Blood no pretende ser algo sofisticado ni retorcido —se lleva mejor con esa idea ligerita del terror, la que espera incluso una pequeña risa después de cada sobresalto—, pero tampoco puede evitar lo de ser especialmente efectivo: un amigo estuvo a punto de caer de la silla por culpa de un fantasma que se le asomó por la izquierda. Ayudan los gráficos, lo bastante creíbles a pesar de los evidentes sacrificios. No todas las texturas se ven con la definición que uno quisiera, pero sí convence la iluminación y su efecto sobre la mayoría de materiales, que además suelen romperse con cierta gracia. En espacios abiertos se pierde detalle y cuesta distinguir algún que otro objeto en la lejanía, pero la sensación de escala lo compensa; durante el enfrentamiento contra el jefe final, ridículo por lo demás, impresiona mirar hacia abajo. Es una lástima que esos puntos álgidos vayan llegando de una manera tan dispersa, en vez de intentar ponerse de acuerdo para formar unas pocas escenas memorables. Incluso la inquietante estética ferial, que en un primer momento aparenta buscar cierta coherencia narrativa, acaba reducida a la mínima expresión —la vagoneta y la vía— cuando la atracción va llegando a su final.

Más complicado lo tiene Rush of Blood para defender su propuesta como título de acción. Es, como tantos otros que intentaron aprovechar el éxito de Wii para reflotar el género, un juego para light gun sin light gun. Están las típicas cajas con armas especiales —la escopeta, la magnum, la uzi y una pistola de bengalas explosivas, todas con munición limitada—, están las bifurcaciones para añadir rejugabilidad y está hecho indiscutible de que apuntar y disparar era mucho más divertido y gratificante en Virtua Cop o Time Crisis. En Supermassive se merecen un aplauso por prescindir de esa habitual retícula que le quita toda la gracia al asunto —en su lugar tenemos la luz de las linternas pegadas a la pistola, infinitamente más sutil—, pero el sistema de puntuación y los multiplicadores no están bien adaptados a la precisión que ofrecen tanto el propio juego como los Move. Hay, también aquí, algo no tan distinto a destellos de genialidad: cuando te salen locos con máscaras de payaso por ambos lados y tienes que girar la cabeza constantemente, cuando te sorprenden las arañas que se te suben al carrichoche… Sin embargo, los enemigos son poco imaginativos y extrañamente escasos. La mayoría de balas, de hecho, van dirigidas a cajas, globos y jarrones con dianas dibujadas. O a unos muñecos que hacen de coleccionable y que sirven, a no ser que me haya perdido algo, para desbloquear un montón de absolutamente nada.

Unitl Dawn: Rush of Blood es un juego funcional, entretenido y a ratos impactante. También es limitado, oportunista y menos centrado que su hermano mayor. En las montañas de Blackwood, el homenaje al cine slasher para adolescentes se juntaba de forma natural con el morbo y la tensión de las decisiones que tomaba el jugador; aquí, sustos y disparos van cada uno por su lado. Y aunque la realidad virtual los potencia por separado, siguen quedando huecos entre las dos mitades. [6]

Redactor
  1. Tachenko

    Vídeo del Sopas jugándolo o no vuelvo a leeros. Primer aviso.

  2. Jaun

    @tachenko
    Hay uno de Xavi que es casi que mejor.

  3. Majin

    sólo un 6? Hijueputa malparido!

    Ahora en serio, esperaba bastante menos teniendo en cuenta lo comentado en el podcast.

  4. suculens_fecalitia

    yo el que tengo ganas que an analicéis es «here they lies» que pinta la mar de interesante

  5. josmig25

    @jaun
    Tienes que llegar al final del video para saber lo que te pierdes.

  6. Dropis

    Sueles poner de ejemplo Virtua Cop y Time Crisis, no te gustó The House of the Dead?

  7. Paco Vidorras

    Una vez más, os salís de la pelleja con el antetítulo. VR-AVO!!

  8. Preacher (Baneado)

    A mí la demo me ha sorprendido para bien. Me esperaba un truñete y tiene momentos muy apañados. Lo he visto por 18€ y no me parece mala propuesta para echar unos raticos. Será flojete, pero al menos es un juego con todas las de la ley, que ya es más que esa desvergüenza de VR Worlds que se vende por el doble de precio.

  9. espinete (Baneado)

    yo despues de ver el video de xavi jugando y el sopas siendo incapaz de jugar, me esperaba menos, y lo peor, sabiendo como son los mandos de ps4 para la RV no espero mucho mas, sin sticks a ver que como sacas un juego decente, ya para la proxima generacion cuando acabeis de testear todo el tema

  10. Pep Sànchez

    @dropis dijo:
    Sueles poner de ejemplo Virtua Cop y Time Crisis, no te gustó The House of the Dead?

    Sí, claro. Sobre todo el primero. Pero me gusta más el rollito del duelo, de disparar antes de que te disparen.

  11. morelli

    ¿Se podría hacer una comparativa con otras VR? Diferencias, juegos, posibilidades… Estoy muy perdido con esta tecnología y no se dónde encuadrar estas PSVR. ¿Hay juegos para las otras máquinas? ¿La diferencia de potencia aporta algo?

  12. Andrs78x

    @morelli dijo:
    ¿Se podría hacer una comparativa con otras VR? Diferencias, juegos, posibilidades… Estoy muy perdido con esta tecnología y no se dónde encuadrar estas PSVR. ¿Hay juegos para las otras máquinas? ¿La diferencia de potencia aporta algo?

    Muy de acuerdo con tu propuesta.
    La verdad es que tengo ganas de probar la VR por curiosidad pero a día de hoy no creo que sea más que eso, una curiosidad

  13. Pep Sànchez

    @nin

    No sé qué has visto en Samsung GearVR y en marcas blancas, pero desde luego me gustaría probarlo. Porque yo he probado también esos dispositivos, además de Oculus y Vive, y no podría estar menos de acuerdo con lo que dices.

    @morelli, @andrs78x

    Está complicado, pero se puede intentar.

  14. Evon

    Que me aspen si el del traje multicolor no es Jack White! ^_^

  15. morelli

    @sishioh
    Gracias por la respuesta!!

  16. Nessin

    Yo las he probado y he de reconocer que es inexplicable. Si no las has probado no se puede opinar. La inmersión es plena y es todo espectacular, a pesar de no verse HD. El problema por ahora es el precio y los juegos que hay para ellas.

    Veo que dan un plus de inmersión muy muy muy gordo, pero tiene que alcanzarse un equilibrio entre su precio y el volumen de juegos decentes que tengan en su catálogo. Si no se llegase a alcanzar ese equilibrio me temo que el tenderete se va a ir a la porra por si solo….(NO! POR DIOS!)

  17. DrTenma

    Yo probé la demo en el VRGate y me dejó muy frío. Lo que más me gustó fue que había trozos en los que realmente parecía que estabas en una montaña rusa, consiguió marearme un poco y todo. Imagino que un ‘Resident Evil VII’ debe asustar de verdad pero con la demo ni siquiera pegué un respingo.