¿El triunfo de la técnica?

Análisis de Tekken 3D Prime Edition

Análisis de Tekken 3D Prime Edition Si algo hace bien Tekken 3D Prime Edition es demostrar poderío. A Arika, los encargados de esta nueva versión y que quizá os suenen por ser los encargados de los Street Fighter EX y, más recientemente, de las ediciones 3D Classics de juegos de NES que han ido apareciendo en 3DS, hay que reconocerles un mérito: con este Tekken demuestran que saben cómo hacer juegos para la consola. Como logro técnico es impresionante; el problema lo encontramos cuando, bueno, queremos jugar: superar las limitaciones tecnológicas no sirve de nada si a la hora de la verdad no tenemos nada que hacer al ponernos a los mandos. Sorprende desde el primer momento que en lo alto del menú principal esté el modo Supervivencia. Por muy especial que quiera parecer (así se llama: Supervivencia Especial), lo cierto es que batallar contra cinco, diez, veinte o cuarenta personajes (que son el total de luchadores disponibles, por cierto; una cifra más que buena) con una única barra de vida no es tan atractivo como para que recaiga sobre este modo todo el peso de una primera partida. A falta de un modo Arcade tenemos un Batalla Rápida, que sirve muy por los pelos de sustituto, y eso es todo. Suena tan escaso como es, sí, aunque se intenta remediar esta ausencia de contenido con la adición de tarjetas 3D coleccionables; no, no es un remedio eficaz. La oferta para jugar en solitario es demasiado pobre, y es lo que hiere de muerte a este Tekken portátil. Análisis de Tekken 3D Prime Edition Ciñéndonos a las luchas, al momento en que manejamos a un personaje, la cosa es menos oscura. Tekken 3D Prime Edition es un buen Tekken: no hay apenas diferencia, sobre el papel, respecto a Tekken 6, lo cual es bastante impresionante y se debe en gran medida a la fluidez gráfica que se ha conseguido. Era esencial que todo fuera como la seda para que un juego como Tekken, que exige cierta precisión, funcionara correctamente, y así ha sido; los botones de la consola, algo pequeños, y la cruceta, que no nos permite ejecutar movimientos con toda la facilidad que debería, empañan un poco una jugabilidad por lo demás trasladada a la perfección a la pequeña portátil de Nintendo. Para solventar estas limitaciones de hardware, cuatro botones virtuales nos acompañan en todo momento desde la pantalla táctil, a modo de accesos directos a diferentes combinaciones (configurables) de botones. Es una opción cómoda para realizar algunos combos que, por pura cuestión física, nos resultan imprecisos al intentarlos de manera legal, aunque evidentemente los puristas estarán, y deben estarlo, en contra de ello; ahí está, para quien quiera usarla. Al final, donde más se aprovecha la buena base de la que parte Tekken 3D Prime Edition es en el combate contra otros seres humanos. Tanto las opciones locales como online son correctas, aunque algunas decisiones de diseño ponen trabas al desarrollo fluido de las partidas contra desconocidos por internet: poder cambiar de personaje entre combates sólo en las partidas sin rango, por ejemplo, es una de ellas. Si decidimos ceñirnos a oponentes que tengan un nivel similar al nuestro, una opción evidentemente atractiva para no meternos en berenjenales que nos queden grandes de primeras, se nos exige elegir un luchador desde el principio y seguir con él hasta que decidamos salir al menú principal. Es un escollo relativamente salvable, pero también una incomodidad de más que no tenía por qué estar ahí; otra de las decisiones incorrectas que toma el juego. Como valor añadido, y con un papel demasiado principal en Prime Edition (nos lo plantan antes incluso de poder elegir la parte supuestamente importante, esto es, el juego en sí), está Blood Vengeance, la terrorífica película que ya estaba incluida en Hybrid, otro ejemplo de producto Tekken pobre. Está adaptada a la resolución de la pantalla de 3DS y con la imprescindible opción de verla en 3D sin gafas, pero sigue siendo el mismo monstruo de animación sin pies ni cabeza que ya tuve que ver en su día, y que desde luego no tengo ganas de ver por segunda vez. La broma infinita llega cuando sólo tenemos la opción de verla del tirón: si salimos para dar un descanso a nuestro cerebro y volvemos a iniciarla, tendremos que empezar desde el principio. Si alguien está dispuesto a verla cientos de veces, a pesar de los daños intelectuales que puede provocar, Prime Edition es la oportunidad perfecta para matar esas neuronas de más que a menudo notamos merodeando por el cerebro. A estas alturas necesitamos más que 60 frames por segundo y un par de modos de juego para estar satisfechos, me temo. Se me ocurre que Tekken 3D Prime Edition podría haber sido una primera toma de contacto con 3DS muy buena para la franquicia de haber sido lanzada, en digital y por un precio reducido, en la eShop de Nintendo. De nuevo, Namco Bandai ha optado por ofrecer un juego cojo metiendo con calzador, intentando engatusar no sé a quién, una película con un interés limitadísimo, y de nuevo se quedan cortos: se puede salvar muy por los pelos por las opciones multijugador, pero dar la espalda al enorme porcentaje de jugadores que habrían preferido un modo historia y un par de opciones más para disfrutar de Prime Edition en solitario no es la mejor de las decisiones. Tendremos que esperar, me temo, a Tag Tournament 2 para encontrarnos por fin con un Tekken a la altura de las circunstancias. [5]
  1. Sestren

    Estando totalmente de acuerdo con la nota y el analisis en general (Namco se ha vuelto de un cutre que asusta), me cuesta entender por qué el Reality Fighters tiene más nota que este Tekken, que aunque no tiene nada de nada, al menos es buen juego de lucha.

  2. apache

    Si, las notas a 3DS, están siendo bastante duras, en contraposición a otras plataformas, y títulos bastante normaluchos tb

  3. Kusaka

    El Soul Calibur tiene el mismo problema, contenido 0. Pero joder!, ni un modo arcade?, es como el Ridge Racer de Vita, que no sacan demo porque regalarian el juego xD.

  4. Víctor Martínez

    @sestren
    En Reality Fighters se ve cariño y trabajo, aquí se ve puro encargo, aprovecharse de una situación concreta. No es lo mismo.

  5. Mariachilocolima

    Ahora resulta que el cariño se puntúa, cuando el Reality Figthers es una caca apestosa de juego.

  6. Pep Sànchez

    Pues sí es un poco de coña, este juego.

  7. Kaneda_0079

    Lo de la pelicula si me parece pesimo, y sin opcion arcade peor todavia.

  8. Sestren

    Puedo entender lo del cariño, pero a la hora de la verdad, cuando te has gastado el dinero y estas jugando, lo del cariño no te da para mucho más que quince minutos.

  9. ikky

    Street Fighter > Tekken
    De toda la puta vida de dios