El Hitler de Sniper Elite 3 solo tiene un huevo

Mi profesor de historia en el instituto, un tipo bajito y calmado de unos sesenta años, siempre nos lanzó indicios sospechosos de una juventud rebelde. Sabíamos que había estado en la cárcel por asuntos políticos, se le adivinaba el vestigio de un antiguo agujero para pendientes en una oreja y se le veía particularmente interesado en los apodos burlescos de personajes históricos como María Antonieta («la puta austríaca» para los franceses) o Francisco Franco («Paquita la culona» para sus compañeros de la mili) y las anécdotas un poquito macabras. Sonreía más de lo normal el día que nos habló del Hitler anterior a El Temita, de su pasado como pintor callejero pseudovagabundo en Austria, de su desastroso rendimiento como soldado en la Primera Guerra Mundial y en particular del rumor hoy nos ocupa: que Adolf Hitler solo tenía un testículo. Hay muchas versiones, a cada cual más locuela, sobre cómo el Führer perdió un huevo, pero la más oficiosa es la que contaba presuntamente un médico de guerra que murió en los 80. Al parecer tras la Batalla del Somme, en el norte de Francia, un equipo de rescate encontró al jovencito Hitler pegando berridos como un animal con medio cuerpo enterrado en cadáveres alemanes y una herida en el abdomen y otra en la entrepierna: en efecto, le habían volado una de las joyas de la corona. Cuentan que varias décadas después el tipo que le salvó la vida y le curó las heridas, Johan Jambos, no conseguía dormir por las noches de pura culpabilidad. Si se hubiese estado quietecito aquel día, en lugar de hacer su trabajo, la de vidas que habría salvado. En la década de los 60, Jambos compartió el secreto que le atormentaba con el sacerdote Fanciszek Pawlar, que tomó nota de sus confesiones en un documento que el Telegraph británico desclasificó y publicó hace unos pocos años. Ahora Sniper Elite 3, que no se caracteriza precisamente por su rigor histórico, ha querido hacer un brillante guiño a este dato. Lo descubrimos gracias a las partidas de AFGuidesHD al DLC que te regalaban si reservabas el juego, Hunt of the Grey Wolf, y que ya está disponible por separado, donde la gloriosa kill-cam nos enseña las interioridades del Führer sin perder detalle de la disparidad huevil. ¡Un aplauso!