Guía de portátiles económicos para jugar

¡Vuelven los portátiles por Navidad! Esta vez renovamos nuestra guía con el objetivo de que vuestros sobrinos os sigan queriendo sólo por los billetes de 500€ que les soltáis a finales de año. Por eso hemos configurado un catálogo de portátiles que ofrecen el máximo rendimiento posible sin subirse a las temidas 4 cifras, tan habituales cuando aparece la coletilla gaming en cualquier equipo.

Consideraciones iniciales:

»  El objetivo es ofrecer una selección de portátiles lo más apta posible para jugar en cada rango de precios. Por eso no buscamos necesariamente modelos gaming: lo importante es que el conjunto de procesador y gráfica sea lo más potente posible y que los equipos disfruten de una refrigeración acorde a eso. Esta vez, además, nos alejamos de monstruos más cercanos a ser «portables» en vez de portátiles. Todos excepto el último tienen un peso en torno a 2-2,5 kg, lo cual hace factible poder utilizarlos como portátiles tradicionales.

»  Nos centramos en modelos por debajo de 1000 € para poder ofrecer más alternativas según las necesidades de cada uno, y porque normalmente son los más solicitados. Por encima de 1000 € la ganancia de rendimiento es pequeña por cada euro invertido, y los precios se disparan. Hay muchos modelos y se llega a un punto en el que ya depende de las prioridades de personales: gráfica, peso…

»  Un PC de sobremesa siempre ofrecerá el doble o más potencia por euro invertido que un portátil, pero sabemos que un equipo así no es viable para todo el mundo, y un portátil es una inversión muy versátil en muchos casos. De cualquier forma, si buscáis el máximo rendimiento posible, podéis echarle un vistazo a la guía de PCs de sobremesa, publicada hace pocos días.

¡El chiquitín para indies! Como ya es tradición en las guías de portátiles, nuestro primer equipo es algo más pequeño que el resto… Aunque esta vez no lo es tanto: 14” por debajo de 200 € y con un x5-Z8300 es una combinación explosiva. Con los nuevos gráficos Cherry Trail, el salto con respecto a los anteriores Atom es notable: no da para juegos modernos, como es de esperar, pero sí que podrá con la mayor parte de títulos independientes, emuladores y un buen puñado de la anterior generación reduciendo la resolución y la calidad gráfica.

Tiene sus limitaciones, por supuesto. 32 GB de memoria interna flash dan para poco, así que se hace casi obligatorio usar una microSD para añadir algo más de almacenamiento externo. Pero en este rango de precios no se puede dar más por menos.

Es el portátil básico que podrías recomendarle a tu cuñao si sólo lo va a usar para leer el Marca y bajarse capítulos de Cuarto Milenio a 480p, pero tiene una peculiaridad que lo hace de gran valor para un gaming modesto: la Intel HD 5500. Una gráfica integrada que permite mover con relativa soltura juegos de la pasada generación, y algunos poco exigentes de la actual bajando las chucherías visuales.

El resto de especificaciones no son particularmente emocionantes: 4 GB de RAM, 500 GB de almacenamiento, pantalla 768p… Pero son suficientes para cumplir su rol de filler como uno de los portátiles básicos con i3-5005U más baratos del mercado, y eso ya lo hace lo suficientemente interesante como para ser el elegido en esta lista.

Si lo único que quieres es echar unos FIFA de tanto en tanto en un equipo modesto, es tu portátil.

Este Lenovo repite procesador. El i3-5005U es un buen aliado en la gama básica, capaz de desenvolverse bien con la mayoría de tareas que se le echen encima. Esta vez, sin embargo, tenemos un subidón importante en el resto de especificaciones: 8 GB de RAM, 1 TB de almacenamiento… Y sobre todo la Geforce GT 920M. Con eso ya podemos aspirar a mover varios juegos actuales como Overwatch, Battlefield 1o GTA V a 720p en calidades bajas.

Es quizá el equipo más equilibrado de la lista en cuanto al dúo procesador-gráfica, y además pesa únicamente 2 quilitos. Ofrece unas especificaciones por encima de lo que cabría esperar para su precio y nos puede hacer la función, además de portátil gaming, como equipo para cualquier tipo de tareas relativamente complejas en el día a día.

Al fin entran los portátiles auténticamente para jugar. Con un i5-6300HQ de 4 núcleos y una GTX 960M, éste rebosa potencia para mover cualquier título moderno en sus 1080p nativos de pantalla. Dependiendo del título y del framerate al que nos resulte cómodo jugar la calidad gráfica bailará desde medio hasta ultra, pero podemos esperar jugar en 1080p en medio-alto en torno a 30-40 fps.

Tiene una limitación importante: los 4 GB de RAM se antojan escasos, pero por poco más se puede ampliar fácilmente a 8 GB con un módulo adicional.

Es un portátil completísimo y hecho para durar. El primero que va con la etiqueta de gaming y probablemente el que mayor rendimiento por euro invertido ofrece de toda la guía, gracias a su magnífico precio actual.

Con un nombre similar al anterior, nos encontramos efectivamente con un equipo que comparte similitudes con el GL552: misma GTX 960M, 1 TB de almacenamiento, pantalla 1080p… Pero esta vez embutido en un equipo de 17,3” para los amantes de las pantallas de generosa diagonal.

Junto con la mejora en procesador a un i7-6700HQ, también recibimos con los brazos abiertos los 8 GB de RAM (con opción a un modelo de 16 GB, o ampliables por el usuario), y a pesar de ser grande, sigue sin superar la barrera de los 3 kg; se planta en 2.800 modestos gramos, correctos para su tamaño.

Si sumamos el puerto USB-C 3.1, la posibilidad de ampliación mediante un SSD M.2, y las teclas retroiluminadas, todo ello heredado del modelo anterior, nos queda un equipo brutal por debajo de 900€.