Lorne Lanning: «En esta industria hay más Britney Spears que Pink Floyd»

Un amigo completamente ajeno a los videojuegos leyó el otro día sobre The Stanley Parable y su reacción me fascinó: «os habéis vuelto muy filosóficos con los jueguitos, ¿no?». El tío se quedó en el Tetris y toda esta reflexión permanente, este debate abierto y esta oleada de cosas «meta» son algo que nos hemos sacado de la manga en los últimos cinco años. Y eso es fantástico, joder, es señal de que el medio está conociéndose mejor a sí mismo y explorando nuevas vías, aunque el grueso de ventas se lo sigan llevando las fórmulas sencillitas y masticaditas de toda la vida. El creador de la franquicia Oddworld, Lorne Lanning, tiene claro que aunque ahora hay más sombra que oscuridad, vamos por el buen camino. Así lo explicaba en Polygon:

Como cuentacuentos del siglo XXI, muchos diseñadores, creadores y guionistas irán haciendo contenido más profundo y más relevante y con mayor significado que reflejen los conflictos y desafíos que presenta el mundo que les rodea hoy en día. Los cuentacuentos llevan haciendo esto desde el principio. Shakespeare reflejó la corrupción gubernamental en sus obras, sin pontificar sobre los problemas obvios de su época. Pink Floyd fue capaz de expresar con inteligencia sus problemas con las prácticas negativas en la industria musical y su desilusión general con el capitalismo, y todo con alguna de la música más vendida de todos los tiempos. Cuando el contenido tiene más profundidad y sentido, puedes crear productos de entretenimiento muy digeribles y de alto consumo. O puede hacer discos de Britney Spears. La industria del videojuego tiene más contenido de tipo Britney Spears que de tipo Pink Floyd. Nosotros siempre hemos intentado hacer más de lo segundo.

Y el gran obstáculo, según Lanning, son los departamentos de márketing, preocupados de una sola dimensión del producto pero con altavoces potentísimos. Suerte de los indies:

El sitio donde es menos probable que encontremos esos productos más influyente, con un contenido más profundo, es en los que tienen mayor presupuesto y su preocupación principal es garantizas resultados masivos de consumo. Todo lo que parezca que pueda obstaculizar esa meta o reducir la audiencia potencial tiene muchas probabilidades de ser eliminado del producto antes de que este vea la luz. Cuanto más se percata la audiencia de que el contenido profundo refleja que realidades importantes puede ser también refrescante e inmersivo, más vemos que los documentales empiezan a tener el mayor éxito de toda su historia. Esto es el reflejo de un apetito en evolución de más gente que quiere contenido mejor y quiere alejarse de sus experiencias con impresiones más duraderas que añadan más valores a sus vidas. Por eso la música indie es mucho más interesante en su contenido que las grandes estrellas del pop con sus superventas a corto plazo. Por eso las películas independientes tienen resultados más valiosos y duraderos en la audiencia que los grandes blockbusters. Los juegos no son diferentes. La mejor forma de ver contenido profundo manifestarse en cualquiera de esos medios es que los creadores encuentren la forma de ofrecer productos por menos precio, para poder retener más influencia creativa en el producto final. El buen contenido aguanta el paso del tiempo, y los grandes estallidos vacíos desaparecen de los libros de historia más rápido.