Bungie apuesta por Joe Ziegler para dirigir una de las esperanzas de PlayStation, mientras que EA ficha a Connie Booth para supervisar los proyectos de Motive, BioWare y Cliffhanger Games.
Han movido su lanzamiento tres meses para hacer una expansión «más grande y ambiciosa» tras la gran oleada de despidos que conocimos el mes pasado.
Hablamos esta semana de la situación den Bungie –de los despidos, pero también de Marathon y del papel del estudio dentro de PlayStation–, de Ghostrunner 2 y de Jusant. De Alan Wake 2, por ahora, solo un poco.
Tenemos muchos datos a analizar gracias a los informes financieros de tres grandes compañías, pero no perdemos de vista lo sucedido en Bungie ni el resto de la actualidad.
Por desgracia, tenemos que hablar de nuevo de despidos. En este caso afectan a Bungie, estudio que también ha anunciado el retraso de la última expansión de Destiny 2.
Todavía no se ha hecho oficial la adquisición de Activision Blizzard King, pero la Recarga Activa continúa para repasar la actualidad del videojuego, un día más.
El director y diseñador deja Riot después de 12 años en la compañía para cumplir labores de game director en un nuevo proyecto que no ha confirmado.
Seis meses después de su anuncio, Sony cierra la compra valorada en 3.600 millones de dólares.
El nuevo tráiler muestra tres armas nuevas y un nuevo sistema que permitirá a los guardianes crear las suyas propias, además de unas gujas que se podrán usar de forma ofensiva o defensiva.
El trato se cerrará por 3.600 millones de dólares y Bungie seguirá siendo un estudio multiplataforma.