Uterus Man, lo grotesco y lo femenino

Los últimos trabajos de la artista china Lu Yang son una danza de balet realizada con cadáveres de ranas diseccionadas conectadas por electrodos a un mezclador midi que envía impulsos eléctricos al ritmo de una melodía formando una especie de coreografía póstuma animal, y una línea de joyas elaboradas con impresoras 3D que forma de tumores, quistes y células cancerosas. Si os creéis que en Japón están muy locos, esperad a ver lo que Shangái esconde en sus barrios más modernos. Hace unas semanas Lu Yang estuvo en Nueva York exponiendo varias de sus obras relacionada con la tecnología en lo que vino a llamar Lu Yang’s Arcade. Su obsesión con el lado más desagradable de la medicina y la anatomía y su capacidad para inventar grotescas deformidades a caballo entre el feminismo destructor de géneros y el puro body horror tan anclado en el cómic japonés de terror la convierten en una mezcla lisérgica de H.R. Giger, David Cronenberg, Junji Ito y… yo qué sé: Evangelion. Ella lo llama «arte estúpido», y quizá será absurdo y brutal, pero de estúpido tiene muy poquito. La pieza central de su Arcade se titula Uterus Man y es un videojuego protagonizado por un superhéroe andrógino (se parece mucho a Dante, de Devil May Cry) que va por ahí disfrazado de útero, se desplaza en un vehículo con forma de pelvis y tiene ataques absolutamente enloquecedores, desde un rayo de cromosomas XY hasta un látigo umbilical o, mi favorito, una técnica con la que juntando los pies y colocándose en forma de T (o de útero) le sale un orificio en los talones y de él nace un bebé que muerde ferozmente a los enemigos y también sirve de mangual, dándole vueltas sujeto por el cordón umbilical y arrojándolo contra los malos. Por cierto, los enemigos son kaijus humanoides a cada cual más chalado, los niveles están basados en enfermedades y Uterus Man tiene un monopatín con forma de compresa y puede volar propulsado por cierto… líquido… rojo.

Siempre he pensado que la forma del útero recuerda a una figura humana con los brazos extendidos y los pies cruzados. Así que al diseñar Uterus Man, puedes distinguir partes distintas del útero en su armadura. Desde una perspectiva sexualmente ambigua, este superhéroe con extraños poderes puede parecer un hombre, pero su fuente de poder proviene en realidad de su capacidad para generar que pertenece a la mujer. Este diseño es irónico y satiriza y cuestiona los principios de la reproducción biológica en nuestro mundo.

De momento circulan varios vídeos de gameplay y un opening que se te va la puta cabeza, pero teóricamente Yang ya trabaja con un equipo de desarrolladores en una versión gratuita del juego.