Se compone de cinco carreras de obstáculos mensuales

El desafío de la puntada de velocidad es la nueva competición online de Sackboy: Una aventura a lo grande

PlayStation Tournaments ha presentado una nueva serie que formará parte de Sackboy: Una aventura a lo grande. Se trata de una competición online formada por cinco carreras de obstáculos mensuales que estarán disponibles mediante las tarjetas de actividad de PS5 bajo el nombre de El desafío de la puntada de la velocidad. Desde este mismo momento hasta enero del 2022 podremos poner a prueba nuestra velocidad completando un circuito en el que se nos asignará una puntuación para compararla con la de nuestros amigos: «cada mes habrá disponibles cinco carreras de obstáculos inéditas en las que tendréis que superar obstáculos tan rápido como podáis para batir récords y subir a lo más alto de los marcadores», podemos leer en el blog oficial de PS5.   

Como premio por superar los diferentes desafíos podremos recibir regalos, trajes exclusivos y varios tipos de coleccionables. Según nuestra marca y habilidad recibiremos distinciones, desde bronce a diamante, que determinarán el tipo de premio a desbloquear. Tras superar los cinco desafíos recibiremos la recompensa de nuestra categoría y de las categorías inferiores a esa. Según se aclara en el FAQ de la competición, podremos enfrentarnos a la carrera todas las veces que deseemos y solo se guardará nuestra puntuación más alta. 

Hace solo unos meses que Sackboy: Una aventura a lo grande se actualizó con el multijugador online y 10 nuevos niveles totalmente inéditos. El plataformas de Sumo Digital  sigue siendo a día de hoy una propuesta sólida que sabe sacar todo el partido del movimiento de su protagonista. En su análisis mi compañero Víctor Martinez destacaba que:

El resultado es justo el tipo de juego de plataformas que enseña y guía, que propone y sorprende, que te señala el camino pero te deja también espacio para la experimentación, el descubrimiento y el juego en su sentido más puro y feliz; uno de esos juegos, y no siempre se da el caso, en los que ambición y ejecución comparten longitud de onda, en los que sencillamente todo funciona como tiene que funcionar, sin necesidad de deslumbrar ni de dejarse llevar por artificios superficiales.

Lee el análisis completo aquí.

Redactora