
Apatrullando la ciudad
E3 2014: Primeras impresiones de Battlefield: Hardline
El Battlefield de policías es un juego considerablemente más caótico y disparatado, distinto a Battlefield 4 de una forma que no me esperaba.
El Battlefield de policías es un juego considerablemente más caótico y disparatado, distinto a Battlefield 4 de una forma que no me esperaba.
Un laboratorio subterráneo donde se hace experimentos más que cuestionables moralmente y de donde, parece, tendremos que escapar resolviendo puzles en primera persona. The Assembly parece una amalgama de ideas que ya funcionaron, aunque con un aire más tenso y serio, y con una particularidad que es lo que le va a identificar: está diseñado para jugarse con los dos sistemas actuales de realidad virtual, Oculus y Project Morpheus.
En Los Sims 4, la vida de nuestras creaciones no tiene por qué girar necesariamente a nuestro alrededor.
Si alguien puede revivir una franquicia de FPS que murió prematuramente, esa gente es Crytek. Al menos sobre el papel: tienen los medios para hacer como mínimo un juego mediocre con unos gráficos loquísimos, que ya es algo.
En NeoGAF alguien se ha percatado de que han empezado a aflorar cientos de cromos misteriosos
Lo mostró Sony en su conferencia del año pasado y es de los indies para PS4 que todavía nos debe; los duelos de Secret Ponchos vuelven al E3 con un tráiler bastante majo.
Ubisoft ya nos dio una ligera idea de lo abarrotada de gente y enorme que será la París pre-revolucionaria de Assassin’s Creed: Unity, pero ahora el diseñador de niveles de Ubisoft Montreal ha hablado con Kotaku de las proporciones del escenario y resulta que es gigantesco.
El juego de Creative Assembly y SEGA convence por su presentación y por resistir la tentación de convertirse en otro shooter.
Un aspecto bastante simpático de este Sombras de Mordor es el enorme cuidado que han puesto en el organigrama sauroniano, las distintas capas de poder, la relación entre ellas y las peculiaridades propias de cada «oficial» de colmillos amarillos y voz cazallera que nos encontremos por el camino.
Creo que nadie duda de la bajona que supuso Dragon Age II, tanto como para que las buenas bases establecidas por el primer juego de la saga hayan dejado de importar y este Dragon Age III: Inquisition se esté llevando la atención justita.