En un año pasan muchas cosas. Pasan tantas que muchas las olvidamos, o no recordamos cuándo ocurrieron, o las creemos anteriores; en un año pasan muchas cosas y merece la pena dedicar unos días, aunque solo sea eso, a repasar los últimos doce meses para abocetar una pequeña cronología general de los principales acontecimientos acaecidos en el Videoverso en 2019. De eso va esta serie de artículos: de poner en orden, sobre el papel y en la cabeza, las principales noticias del mundo del videojuego de este año.
En una entrevista con IGN, Pete Parsons, CEO de Bungie, habló de la vida que el estudio espera tener más allá de Destiny… dentro de unos años, al menos. Sin dejar de lado las grandes ambiciones (Parsons reconoce que quiere hacer que su estudio sea “una de las mejores compañías de entretenimiento del mundo»), se marca un plazo relativamente generoso para este nuevo proyecto no relacionado con Destiny: el año 2025, que suena tan lejano que podría estar en el título de una secuela de Blade Runner. Ya hay gente pensando en 2025 y nosotros aquí, dándole vueltas todavía a 2019. ¡Hay que ver!
En una entrevista con IGN, Pete Parsons, CEO de Bungie, habló de la vida que el estudio espera tener más allá de Destiny… dentro de unos años, al menos. Sin dejar de lado las grandes ambiciones (Parsons reconoce que quiere hacer que su estudio sea “una de las mejores compañías de entretenimiento del mundo»), se marca un plazo relativamente generoso para este nuevo proyecto no relacionado con Destiny: el año 2025, que suena tan lejano que podría estar en el título de una secuela de Blade Runner. Ya hay gente pensando en 2025 y nosotros aquí, dándole vueltas todavía a 2019. ¡Hay que ver!
Shawn Layden se va de Sony
El hasta ese momento presidente de Worldwide Studios, Shawn Layden, dejó la compañía en octubre después de 32 años trabajando en Sony. Las malas lenguas hablaron en ese momento de una situación complicada en Sony, que se enfrentaba a una serie de reestructuraciones y cambios en la alta directiva mientras se preparaban para la conversión de Sony Interactive Entertainment en un departamento global; las diferentes maneras de trabajar de cada mercado estaban siendo más difíciles de gestionar de lo esperado, y en ese tiempo varios cambios inesperados (como la sustitución de John Kodera por Jim Ryan a la cabeza de SIE) dificultaron la preparación de la compañía para encarar la próxima generación, unas dificultades que al parecer están afectando también a las third parties que trabajan con Sony. Layden, ya fuera de Sony, parece no tener planes inmediatos para volver a un trabajo tan intenso como el que tuvo en sus treinta años en la compañía: desde finales de los 80, tanto desde Japón como desde Estados Unidos, estuvo involucrado con la división de computer entertainment de Sony, en buena medida liderando las relaciones con estudios de todo el mundo que han acabado culminando en unos últimos años de PlayStation 4 llenos de grandes éxitos y proyectos de gran ambición. Hablando de Worldwide Studios, Shuhei Yoshida, que ocupaba el puesto más alto dentro de la división, dejó su cargo en noviembre para liderar una nueva iniciativa dirigida a las relaciones de PlayStation con estudios independientes. Su asiento como presidente lo pasó a ocupar Hermen Hulst, director ejecutivo de Guerrilla Games.#FreeHongKong
Los choques de Blizzard con su comunidad a raíz de la expresión de apoyo a Hong Kong que un jugador profesional de Hearthstone realizó en un torneo oficial son un complejo eco de la actual posición de China en el mundo, así como de las no pocas inversiones en empresas de entretenimiento occidentales de las que ya hemos hablado en esta serie de artículos. En octubre, el jugador Chung «blitzchung» Ng Wai fue suspendido por mostrarse favorable a las protestas de Hong Kong durante un streaming oficial de Blizzard; este posicionamiento político viola, según Blizzard, el reglamento del torneo, y de él se deriva el año de suspensión y la retirada de hasta 10.000 dólares en premios. A pesar de que la penalización se ablandó a posteriori (medio año de suspensión y ningún castigo económico), este primer paso causó descontento entre una parte de la comunidad, que se mostró a favor de blitzchung y puso en tela de juicio la independencia de Blizzard: su gran popularidad en China, un país conflictivo por la presión que ejerce sobre actores internacionales para limitar la expresión de ideas políticas contrarias al gobierno, hace sospechosa esta fuerte penalización. Con la sombra de estas posibles presiones del gobierno chino sobre su cabeza, Blizzard celebró su BlizzCon anual dando tibias explicaciones sobre su postura y haciendo frente, de nuevo, al descontento de una parte de la comunidad que considera este movimiento una consecuencia directa del control chino sobre las operaciones de la compañía. Un breve resumen de las protestas de Hong Kong y los conflictos con China se puede encontrar en BBC.
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