Supongo que si os interesan dos juegos de tan intensa vocación estética como The Unfinished Swan y Journey, ya debéis de tenerlos a buen recaudo en el disco duro de vuestra PS3. Si no es el caso, esta es la mejor oportunidad que se os va a presentar en mucho tiempo: ambas joyas exclusivas de […]
Ya lo dijo Pep en su fenomenal análisis: si de algo peca The Unfinished Swan es de esa clásica falta de ambición, de no tenerlas todas consigo respecto a una idea brillante y una puesta en escena mejor. Quizá la mejor forma de hacerle ver la luz a Giant Sparrow es comprando el juego masivamente, y con lo que se dice de él y lo que nos enseñan, ya pueden contar conmigo.
Que The Unfinished Swan le debe mucho a thatgamecompany no hace falta que lo diga yo; lo hace él mismo y no solo en el espacio para agradecimientos de sus créditos. Jenova Chen y compañía crearon un espacio —en la industria, pero también, y eso es lo que nos interesa especialmente ahora, dentro de Sony— […]
Acaba de confirmar Sony que el primer juego de Giant Sparrow llegará a PlayStation Network el próximo 24 de octubre, aunque los usuarios con Plus podrán descargarlo una semana antes. Son varios los motivos para tenerle ganas a The Unfinished Swan: es indie, es bonito, es diferente y es el primero de los tres proyectos que hará con Sony la gente que ocupa las oficinas que habían sido de thatgamecompany.
Como ya hiciera Braid a poco que uno preste atención, parece que la mecánica de The Unfinished Swan no será simplemente algo bonito, sino que servirá de metafora para algo tan real y adulto como la pérdida. La madre del protagonista, a quien le encantaba pintar cuadros, fallece y el chico va de cabeza a un orfanato. Allí solo le dejan llevarse uno de los cuadros de su madre como recuerdo, y él elige en cisne inacabado, que desaparece una mañana.
Otra de esas muy encomiables y agradecidísimas apuestas indie de Sony, The Unfinished Swan, también ha querido tener su pequeño rinconcito en la gamescom. Esta vez tráiler añade a lo que siempre nos enseñan (escenarios blancos y bolas de pintura para distinguirlos) bellos entornos semicoloridos que no se habían visto hasta ahora y que dan la impresión de que el mundo del juego irá cambiando a medida que interactuemos con él.
El casimuertismo empieza a apoderarse de la resaca post E3 y la loca tormenta de actualidad ya se atenúa, dejándonos ver con más claridad lo que interesa y lo que no. Y a mí The Unfinished Swan, a pesar de mantener un perfil discreto, me tiene muy interesado en su propuesta de exploración a base chorrazos de pintura. Quizá estaría bien algo más de esmero en las texturas, pero el juego sigue pareciéndome una joyita por ahora.