
Minecraft, el nuevo solitario
Microsoft, a punto de comprar Mojang
Se habla de un un trato que podría acabar firmándose esta misma semana y que rondaría los 2.000 millones de dólares.
Se habla de un un trato que podría acabar firmándose esta misma semana y que rondaría los 2.000 millones de dólares.
Mojang sigue enfrascada en el perpetuo desarrollo y mejora de su máquina de imprimir dinero, Minecraft, y el próximo gran añadido será una función que vienen pidiendo los jugadores desde el mismísimo primer día. Se trata de la posibilidad de generar un mundo decidiendo sobre algunas de las variables concretas que lo componen.
La serie de Matt Groening homenajea al juego de Notch en el último episodio que se ha emitido.
El juego de Notch sigue petándolo allá por donde pasa, y se lleva la corona de la tienda digital de Sony después de solo tres meses a la venta.
Minecraft, ese abismo de perdición donde ingenieros en paro y niños de doce años se dan la mano, ha servido para auspiciar un nuevo homenaje a un juego sobre el que han corrido ríos de tinta estas semanas. Flappy Bird, el jueguico que le cambió la vida a un vietnamita con demasiado sentido de la responsabilidad, desapareció de las tiendas digitales para no volver jamás y dejarnos una estela de clones a cada cual más flagrante y asqueroso. Ahora podemos jugar lo que parece un «port» a Minecraft, una máquina recreativa virtual donde una pobre gallina cuadriculada se ve obligada a ser cómplice de nuestros feroces vicios.
Desconocía la existencia de este tipo que descubro hoy gracias a VG247, y lo cierto es que aunque al principio la sensación es de que se trata de un zumbado con mucho tiempo libre, a poco que uno lea sobre el asunto descubre que hay algo romántico y esperanzador en su periplo. Kurt J. Mac explica en una entrevista concedida al New Yorker que hace dos años se enteró de la existencia de una suerte de final del mundo de Minecraft, un lugar donde el motor del juego empieza a fallar en su tarea de generar terreno proceduralmente y esa zona deja de corresponderse con las reglas matemáticas del resto, y empiezan a producirse bugs, fracturas en el terreno y formas extrañas. Es algo sobre lo que el propio Notch escribió una vez: las Far Lands, un lugar donde el código del juego falla y el mundo empieza a desintegrarse.
Hoy ha llegado a la PSN yanqui y mañana lo hará a la europea, pero en cualquier caso se puede decir ya que al kraken lúdico parido por Parkus Persson le ha salido otro tentáculo, uno más, para alcanzar a la PS3 de Sony (un poco tarde, si me preguntáis, un año y medio después de aterrizar en XBLA) con la total seguridad de que PS4 será la siguiente. Desde luego quien no haya probado nunca Minecraft lo tiene más a mano que nunca.
Parece que esto de las partidas retransmitidas se va a convertir en la next big thing de los jueguicos, a juzgar por la dirección que está tomando todo el mundo.
Se pueden decir muchas cosas buenas y malas de Mojang, Minecraft y Markus Persson, pero no se les puede negar a los tres juntos la categoría de fenómeno fascinante.
qCraft es un mod para Minecraft diseñado por Daniel Rattclife (que no Radclife) con una sola idea en la cabeza: enseñar física cuántica de una forma sencilla e interactiva. El juego está plagado de experimentos sobre conceptos como la dependencia observacional, la superposición o el entrelazamiento cuántico, algo difíciles de entender en texto pero más accesibles trasladados a una realidad digital. Sigue siendo un mindfuck para los de letras, pero ayuda a comprender algunas cosas.