Suscrita por accidente

Nintendo y Sony actualizarán las políticas de sus suscripciones para evitar renovaciones accidentales

La Competition and Markets Authority (CMA), un órgano regulador de competencia y mercado en Reino Unido, ha realizado una investigación a los servicios de suscripción de Sony (PlayStation Plus) y Nintendo (Nintendo Switch Online). En respuesta, ambas compañías cambiarán la forma de comercialización de ambos servicios con el objetivo principal de evitar renovaciones automáticas, que en muchos casos se producen de forma accidental e indeseada.

Por el lado de Sony, han confirmado que se pondrán en contacto con los miembros de PlayStation Plus que permanezcan inactivos a largo plazo para recordarles su suscripción en caso de que la estuvieran pagando sin ser conscientes. En el caso de que continúen sin recibir noticias de estos usuarios, dejarán de recibir sus pagos como medida preventiva.

Nintendo, por otra parte, ya no marcará como predeterminada la opción de la renovación automática a la hora de contratar Nintendo Switch Online, sino que serán los propios jugadores quienes tendrán que activarlo manualmente.

Michael Grenfell, director ejecutivo de la CMA, explica que el objetivo de estos cambios en el sector es el de «proteger a los clientes y ayudar a abordar las preocupaciones sobre las suscripciones de renovación automática». «El anuncio de hoy concluye, por tanto, nuestras investigaciones en el sector de los videojuegos en línea. Las empresas de otros sectores que ofrecen suscripciones que se renuevan automáticamente deberían revisar sus prácticas para asegurarse de que cumplen la legislación de protección del consumidor».

Para quienes se pregunten qué pasa con Microsoft, la compañía americana ya se encargó de renovar sus políticas a principios de este año, tanto con Game Pass como con Xbox Live Gold. Desde entonces, avisan con antelación de la fecha del próximo pago y cuál sería el importe exacto, y devolverían el dinero a aquellos usuarios que los renovaran por accidente en los días posteriores. En el caso de que estos usuarios permanecieran inactivos, como en el caso de Sony, se pondrían en contacto con ellos y en última instancia dejarían de aceptar sus pagos.