Caquita submarina

SOMA nos enseña sus escenarios y se desmarca de Amnesia

Antes de su última colaboración con thechineseroom para hacer Amnesia: A Machine for Pigs, lo último que habían hecho en Frictional Games es Amnesia: The Dark Descent, así que es bastante razonable que quienes seguimos de cerca su nuevo proyecto, SOMA, lo asociemos con la franquicia que les ha hecho famosos. Más que nada porque parece lo mismo pero en una instalación submarina.

¡Pero ojo! Esta semana han publicado un nuevo tráiler para enseñarnos un poco mejor los escenarios del juego y han aprovechado la tesitura para responder algunas preguntas sobre SOMA en su blog oficial, precisamente sobre el posible parentesco entre el terror de SOMA y Amnesia. Hay diferencias, dicen:

Amnesia: The Dark Descent es opresivo desde el inicio mismo, tiene picos a mitad del juego, y luego sigue hasta el final. Es un juego que trata de poner a prueba tus nervios, pero que también aturde después de un rato. Es muy común que los jugadores sientan que se ha perdido algo del impacto a mitad de la experiencia. SOMA transcurre de una forma distinta. Primero se apoya más en un tono misterioso e inquietante, poco a poco empieza a aumentar en sustos y el pico viene muy avanzada la partida.

Otro aspecto es que el terror en SOMA depende mucho de que el jugador empiece a entender los temas que estamos explorando bajo la superficie. Estos elementos se presentan desde el inicio, y a medida que el juego progresa te los encuentras en situaciones cada vez más perturbadoras; cosas que parecen triviales al principio del juego se enredarán más profundamente con tu propia historia.

También es importante señalar que SOMA se apoya en formas de asustar muy diferentes. En Amnesia la atención estaba puesta en una especie de tren de la bruja lleno de cosas terroríficas y sobrenaturales que podían aparecer en cualquier momento. La mayoría de sustos tenían que ver con inducir respuestas muy primarias relacionadas con el miedo a la oscuridad. SOMA en cambio deriva mucho de su terror en la temática. El miedo no vendrá de reacciones tan atávicas y viscerales, sino más bien de pensar en tu situación y los eventos que se desarrollan en ella.

Quizá lo mejor de todo este asunto no sea las diferencias entre SOMA y otros juegos, sino la evidencia de que estos tíos entienden perfectamente los mecanismos en la ficción de terror y la certeza de que nos la van a meter doblada, de un modo u otro, en la oscuridad de nuestro salón. Ya sabéis, a patir del 22 de septiembre.

Redactor
  1. _Konrad_ (Baneado)

    Sí a los juegos de terror. No a los juegos de sustos.

  2. Gegr is Win

    Pues sí que saben manejar el miedo si esto resulta bien. SOMA me tiene expectante, más por como presenta los sustos que por sus mecánicas en sí.

    @pinjed hay dos errores en la cita, el primero en «deriva mucho d su terror … » y el otro un poco después «En miedo no vendrá de reacciones …»

  3. pinjed

    @gegrmova

    ¡Corregido, gracias!

  4. mio_tony

    Muy bien les tendrá que salir el invento si quieren mejorar su gran obra maestra: Amnesia TDD.

  5. BoKeRoN

    De momento, siguen siendo los amos. A ver si superan el excelso Alien Isolation, que es el más guapo y listo de sus hijos.

  6. MouseKinski

    Las instalaciones submarinas me recuerdan, ligeramente, a la peli Leviathan (1989), la de Peter Weller (creo que había un survival de Dreamcast basado en esta película). Y lo de adherir el terror a la temática, y no a los momentos, es bastante interesante (y no sé si necesario).

  7. Preacher (Baneado)

    Eso que comentan de la estructura es música para mis oídos. Sus anteriores juegos me han gustado, pero tienen un ritmo completamente horizontal y sobre la mitad del desarrollo se crea una sensación de hastío que se los carga. Hay que echarle un par de huevos para llegar hasta el final, y no precisamente por el miedo.

  8. Sams

    Bueno, pues nos lo han conseguido vender. A ver que tal eso de jugar con otro tipo de miedo.

  9. SavageSteak

    @nin

    Leviathan la vi de pequeño y a esas edad lo que me impacto. Ya ni me acordaba del nombre.