El caso Great Big War Game: una advertencia para desarrolladores indie

Rubicon Development lanzó Great Big War Game en 2012 y todo fueron loas y vítores. El juego de estrategia para móviles y tabletas fue comparado con el clásico instantáneo Advance Wars, recibió una nominación en los premios BAFTA y varios medios lo seleccionaron en los tops anuales como mejor juego para móviles del año. Hace no mucho decidieron publicar una versión para PC, pero como no tenían experiencia comercial en ese campo decidieron dejar en manos de un publisher toda la gestión con Steam. Y, por lo visto, la cosa no salió nada bien. La semana pasada Rubicon volvió a poner el juego en Steam, esta vez con ellos mismos como distribuidora, y su cofundador Paul Johnson ha aprovechado la tesitura para publicar un comunicado en el que relatan su experiencia para que sirva como pequeño cuento con moraleja a todos aquellos desarrolladores independientes en busca de publisher sobre los peligros en la sombra. He pensado que quizá a muchos os sea útil:

Siempre quisimos sacar Great Big War Game en PC, pero no creíamos que fuéramos capaces de conseguir un Greenlight porque nuestros seguidores, nuestra reputación y nuestra visibilidad vienen de los móviles. Tampoco teníamos, en aquel momento, conocimientos de prensa para hacer que una versión descargable fuese cubierta o promocionada en los medios. En lugar de eso, contactamos con algunos pequeños publishers para decirles que el juego estaba disponible, y unos pocos se interesaron. Uno de ellos hizo una propuesta particularmente buena que incluía presencia en las cadenas Walmart y Target y en Steam, así que nos fuimos con ellos. Steam siempre fue nuestra gran prioridad y ellos lo tenían dominado, de modo que sellamos un acuerdo. Y nos metieron en Steam, pero lo de las dos grandes cadenas nunca llegó a suceder. De las ventas en Steam, recibimos dos cheques del publisher en los siguientes seis mesas, lo que parecía muy poco dinero en comparación al volumen de nuevos jugadores que registrábamos en nuestro sistema multijugador. Y no volvimos a saber de ellos. Por suerte, Valve —tras las adecuadas confirmaciones legales— generosamente nos permitió transferir los derechos de vuelta a Rubicon, y el juego volvió a Steam bajo nuestra distribución hace unos días. Desafortunadamente, eso sí, esto hace que el juego no califique como nuevo lanzamiento, así que no recibiremos la típica fanfarria promocional que todos los títulos de Steam reciben en su arranque. Y, por supuesto, el elefante en la habitación aquí es que cualquier interesado en comprar el juego probablemente ya lo hizo en su día, y pagó a otros por él, así que no vamos a ganar mucho dinero con esto. Ese barco ya zarpó. En resumen: tened cuidado con lo que deseáis. Nosotros sacamos nuestro juego en Steam, que es lo que siempre quisimos, y no hemos recibido prácticamente nada a cambio a pesar de vender muchas copias, por lo que creemos; no tenemos acceso al historial de ventas del publisher, eso les sigue perteneciendo a ellos. Hubo también otros problemas. El juego que lanzamos inicialmente tenía algunos bugs, como un conflicto al hacer alt+tabulador en algunas máquinas. Los arreglamos con rapidez y mandamos las nuevas builds al publisher, pero tardaban mucho en subirlas a Steam y los bugs iban atrayendo a más clientes descontentos. Y claro, nuestro nombre aparecía todo el rato, así que esa parsimonia general nos dio mala imagen cuando en realidad nosotros intentamos ser todo lo diligentes posible con la asistencia al cliente y la implicación en general. En los foros he visto posts sobre qué panda de gilipollas son estos de Rubicon, pero creo honestamente que no es culpa nuestra. No solo no ganamos dinero, sino que además recibimos desprecio. Ahora el juego está en Steam y obviamente nos sentimos orgullosos de tenerlo ahí. Estamos muy agradecidos a Valve por ayudarnos con esto. Una extraña cadena de circunstancias hizo que esto valiese muy poco para nosotros en lo financiero, pero sigo entusiasmado con el hecho de señalar a Steam y ver a nuestro juego ahí sentado. Siento que hemos madurado.