La distribución digital como próximo cénit consumista

Black Friday y la tormenta (de dinero) perfecta

Black Friday y la tormenta (de dinero) perfecta

Hoy Videogamer informaba de que durante este Black Friday, las ventas de DriveClub han aumentado en un 999%. No, no he tecleado un 9 de más: casi diez veces más de sus cifras habituales. Números como esos justifican para muchos la existencia de una tradición abiertamente consumista que ha aprendido a adaptarse a las circunstancias de la economía global, que está consiguiendo sobrevivir a base de evolución y movimiento, de expandirse propulsada por la creatividad de los vendedores en época de vacas flacas. Como decía el Dr. Ian Malcolm, «la vida se abre camino».

El Black Friday lleva unos años tratando de inocularse en la cultura de consumo europea. En Reino Unido ya lo ha conseguido, y en España lleva varias embestidas, aunque parece que este año ha sido la más sonora. Los comerciantes españoles están dispuestos a agarrarse a cualquier asidero que pueda allanarles el tortuoso camino hacia la Navidad, y el Black Friday es un invento ideal que no hemos dejado de leer en carteles y escuchar en anuncios. Los comercios están tan desesperados que ni siquiera han traducido el nombre de la tradición a “viernes negro”, por miedo a que la gente sienta connotaciones negativas o por miedo a que no funcione si alteran la fórmula, pero por miedo en cualquier caso. Y desde el pueblo llano una sola incógnita recorre las calles y las mentes de la gente: ¿qué cojones es eso del blat fardei?

La mitología de la tradición dice que el Black Friday se llama así porque después de ese viernes de compras a lo loco, las cuentas de las tiendas pasan de números rojos a números negros. Se celebra en teoría el cuarto viernes de noviembre, el festivo que llega tras el Día de Acción de Gracias, aunque en Europa y sobre todo en internet el formato se ha dilatado y las rebajas suelen durar varios días. No es casualidad que Valve inicie sus eufemísticas “Rebajas de otoño” a dos días del Black Friday, del mismo modo que en España al no celebrarse esa festividad, las barreras del período de ofertas se mueven en una u otra dirección según decida el comercio.

Black Friday y la tormenta (de dinero) perfectaLa revista Time avisaba en 2013 de que las ventas del Black Friday llevan años cayendo en picado si solo contamos la operaciones del mismo viernes, y si uno hace un cálculo rápido se da cuenta de que vender a precios bajos en grandes cantidades durante varios día festivos no termina de ser la fórmula mágica que convierte lo rojo en negro. Algunas grandes superficies como K-Mart iniciaron esta práctica de convertir el Black Friday en una maratón consumista de cuatro días, algo que si bien sumando los sueldos a empleados y refuerzos en días festivos y los gastos de electricidad y otros recursos hace que los números no salgan, servía como maniobra de fidelización y promoción: pierdo dinero pero me como la cuota de mercado de mis competidores.

Es algo que funciona cuando solo lo hace uno, pero cuando la competencia se apunta a la misma práctica, los pedazos del pastel vuelven a estar más repartidos, los gastos son menos rentables y los porcentajes de rebaja empiezan a reducirse. La gente comienza a preguntarse si vale la pena embarullarse en melés de docenas de personas dentro de una tienda y deciden quedarse en casa. Es el principio del fin del Black Friday tradicional, sometido a una probable extinción progresiva, y el nacimiento de su próxima cepa: la digital.

Y es que la gente que renuncia al Black Friday de las colas y lo empujones sigue teniendo las Navidades a menos de un mes y la obligación social (o el gusto) de comprar regalos, algo que parece irrenunciable. Así que, con el pavo todavía bailándoles en el tracto digestivo, se sientan frente al ordenador y se dan cuenta de que las grandes tiendas virtuales (que están abiertas las 24 horas y no necesitan alterar su funcionamiento aunque sea festivo y tengan oleadas de clientes) son las que ofrecen rebajas más generosas. No solo eso: pueden leer reseñas de productos, usar comparadores de precios o hacer un poco de investigación sobre el comercio al que acceden. Son compras relajadas, más reflexivas, más responsables y más conscientes. Es el consumismo new age.

En la industria del videojuego esta nueva versión del Black Friday tiene una versión todavía más exacerbada gracias a una alineación de factores distintos. El abrazo cada vez más apasionado a la distribución digital significa la automatización de las ventas y un ahorro sustancial por parte del comercio online, que no depende de horarios, trabajadores ni convenios: la facturación se hace sola y el juego o la app llegan al consumidor. A esto hay que añadir la propensión de la prensa del medio a servir como guía de compras o como mínimo a invitar a su audiencia a danzar y beber juntos alrededor de la hoguera de dinero. Una tormenta perfecta de juegos tirados de precio, tarjetas de crédito echando humo y vídeos o gifs animados de alegre fervor religioso.

Black Friday y la tormenta (de dinero) perfecta

La fórmula funciona tan bien en la red que hace uno años las cadenas Norteamericanas se sacaron de la manga el Cyber Monday, una especie de secuela consumista solo tres días después del Black Friday, pero esta vez centrada exclusivamente en la venta online. Al principio se trataba de vender electrónica de consumo, pero desde 2011 la vorágine de compras se ha disparado y el ciberlunes acoge ya todo el grueso de la venta por internet. En 2011, la cantidad de gente que acudió al Black Friday físico en Estados Unidos descendió un 8% respecto al año anterior, y las ventas cayeron un 2% en lo que parece un caso de estancamiento. Aquel mismo año la facturación durante el Cyber Monday aumentó un 22%, cifras que en 2013 crecieron un 35% más, alcanzando un volumen mareante de más 2.200 millones de dólares. Una locura.

Nadie sabe si el Black Friday seguirá conviviendo con el Cyber Monday o lo fagocitará, o si en el furo tendremos también un Green Wednesday, un Pink Sunday o un Yellow Tuesday, pero es evidente que si las ventas online son el mayor filón del consumo global actual (la tienda online china Alibaba facturó más de 9.000 millones de dólares en el Día del Soltero, hace tres semanas), la distribución digital será, a medida que se siga implantando, el gran power-up que convierta los números rojos en números negros, el agua en vino y el café de las grandes corporaciones en Don Perignon del 59.

Redactor
  1. Tempano

    Mucha mierda que revolver en todo esto, desde mi punto de vista al menos.

    El término oferta se ha diluido tanto que son pocos los que realmente aguardan a que un producto se ponga en oferta y no tiran de arrebato consumista de «como está barato pos pal carro».

    Llevo tiempo queriendo escribir un artículo -me puede la vagancia, como a todos-, sobre la terrible situación de game-pendings en Steam. Esos listados que siguen aumentando sus filas porque un juego está de barato. Se nos está yendo de las putas manos y no es al primero que conozco -ni será el último-, que pilla un juego de «oferta» por 5 euros, pasan seis meses, sigue sin jugarlo, y a los ocho meses aparece por 1 euro dentro de un Humble Bundle.

    Sinceramente, entre Humble Bundle, Steam y demás mierdas, se nos ha ido la cabeza para mal. Que sí, que habrá quien se haga sus planes, pero si ahora arrojáramos una estadística de gente que tiene juegos en Steam comprados pero no jugados y que además, en ese lapso de tiempo, han visto reducido el precio de éstos por debajo del que pagaron inicialmente, sería desolador. De hacernos pensar seriamente qué cojones estamos haciendo.

    El dinero virtual es un puto peligro, Steam y tantos otros sitios lo saben, pero muchos consumidores todavía no se han dado cuenta.

  2. Ryszard

    No me puedo creer que Driveclub haya aumentado por 10 sus ventas sin funcionar aún bien… Lamentable.

    Bueno, lo de que no se alteran aunque tengan oleadas de clientes… el viernes a las 00 cayeron muchas webs españolas y europeas, tanto de electrónica como de ropa.

    Y en España, tampoco lo he seguido a fondo, pero las rebajas que he visto era reirse en tu puñetera cara. Y no me refiero a que suban el precio antes, sino a que el descuento en sí era irrisorio.

    Tampoco buscaba nada especial, si acaso una tableta para estas navidades, pero la verdad tanto bombo para nada. Ya digo igual ha habido tiendas que sí, no lo he seguido tanto, pero lo que yo he visto… muy meh.

  3. Ryszard

    @tempano dijo:
    El dinero virtual es un puto peligro, Steam y tantos otros sitios lo saben, pero muchos consumidores todavía no se han dado cuenta.

    Cuanta razón. Y yo soy el primero, no con Steam porque no tengo cuenta, pero sí de comprar por Internet en general.

    Como darle a «COMPRAR» no quita billetes de la cartera (o tú no lo ves), pues parece siempre más fácil… Es un problema, sin duda.

  4. Jesús Alonso Abad

    @pinjed dijo:
    […] la distribución digital será, a medida que se siga implantando, el gran power-up que convierta los números rojos en números negros, el agua en vino y el café de las grandes corporaciones en Don Perignon del 59.

    Esto debería ir de cabeza y sin tocar suelo a los libros de economía, mercadotecnia o lo que corresponda.

  5. marearp

    Como no tengo un duro no suelo picar en estas cosas, de todas formas correr confiado a la tienda pensando que vas a pillar una oferta es algo un poco trambólico. Prefiero comparar durante meses que ir a unas rebajas programadas.

  6. Jesús Alonso Abad

    @risarovi dijo:
    Tampoco buscaba nada especial, si acaso una tableta para estas navidades, pero la verdad tanto bombo para nada. Ya digo igual ha habido tiendas que sí, no lo he seguido tanto, pero lo que yo he visto… muy meh.

    Echa un ojo hoy. Esta mañana he tenido que quitar el spam de mi bandeja de entrada a paletadas de todo lo que me ha llegado por el Cyber Monday, de tiendas españolas y extranjeras. Y mismamente Amazon tiene rebajado hoy el Kindle, pero ha estado al precio habitual toda la semana, Black Friday inclusive.

  7. borya89

    @risarovi
    hombre, a este tipo de servicios de compra online sólo deberían acceder adultos o adolescentes bajo control parental, puedo entender que a un chaval de 15 años se le pueda ir la pinza, pero si eres adulto lo eres para todo y debes saber que el no dar un billete en mano no implica que lo estés perdiendo, es una cuestión de cultura y de educación.
    Yo con estas cosas hago cuentas y me marco un techo de gasto, es verdad que en ocasiones hay que tener fuerza de voluntad pero por eso no se les da tarjetas de crédito a niños.
    Este año sólo me compré Alien Isolation, un juego con apenas 2 meses por 20 pavos.

  8. Sephirot's blade

    Por lo que he podido leer, en EEUU, como siempre, ha habido gangas, ofertones y chollazos; y es que ESO es el Black Friday, coño. Pero aquí en nuestro país ha sido un poco triste este año, quitando los iPads con el 20% de Carrefour, que volaron a los 30 minutos. Como siempre (y como en Media Markt en años anteriores), casi sin stock.

    Este año, aparte de que Apple no ha celebrado el Black Friday por primera vez en mucho tiempo, en centros como Media Markt apenas había cuatro ofertas muy contadas, y poco atractivas. Lo más fuerte ha sido lo de El Corte Inglés, que según decían algunas locas del shopping que me tropecé aquella tarde, el 20% te lo daba en forma de vale regalo, para que te lo gastaras allí.

    Por lo demás, el grupo Inditex hizo un 20% en todas sus tiendas (Zara, Pull & Bear, Massimo Dutti, Bershka, Stradivarius, Oisho…) que me sirvió para llevarme un par de vaqueros muy chulos. Cortefiel hizo el 50% en algunas chaquetas-parkas que no sé si serían restos, pero yo me llevé una cazadora negra muy molona que de 180 se quedó en 80€.

    Volviendo a los videojuegos (por aquello de que este es un blog dedicado a los mismos), estuve buscando el pack PS4 «last gen», ese que se ponía a la venta el Black Friday en los States, compuesto por PS4+GTAV+The Last of Us; me interesaba bastante y si lo hubiera visto a menos de 400€ pues hubiera tentado a mi yo consumista. Pero afortunadamente en España no ha llegado dicho pack.

    Los packs next gen, especialmente los de PS4 que son los que me interesan, han sido un poco meh este Black Friday. Nada que entre en la definición que conocemos de chollo: Aquello que da la sensación de que el fabricante está vendiendo a precio de coste, si no por debajo.

  9. Yorda

    Muy buen artículo @pinjed. Muy jodidos estamos como personas la verdad, esa es mi conclusión, pero no nos resistimos y siempre queremos mas y mas.

    Estoy al 100% con @tempano. Yo con Steam a los 100 y pico juegos he parado y de momento dejo Steam por un tiempo. Compras a buenos precios pero no juegas ni a la mitad. Llevo casi un año intentado jugar un juego tras otro com si de los tiempos de Super Nintendo se tratara pero es muy difícil. Siempre quieres más, y quieres una One, y una Ps4, el Capitan Toad y un super pc para volver a Steam y seguir hasta los 300 juegos.

    Es muy difícil automoderarse y luchar contra nuestro yo consumista.

  10. natxopistatxo

    Pink Sunday y Yellow Tuesday ya, hoygan!!

    Las rebajas de Steam son lo peor. Siempre encuentro algún juego que quería hiperrebajado y me acabo gastando más de lo que pensaba. Como dicen por ahí arriba, aun no he jugado a todos los juegos que he comprado pero soy un adicto a las gangas. La cosa es que no estoy seguro de si quiero reformarme 😛

  11. uroboros

    El milenarismo ha llegado!!!

  12. Lokewen

    Creo que tambien una de las razones para no hacer unicamente un dia de Black Friday en Europa, es que nos encontrmaos ante una cultura distinta, donde aunque somos consumistas, si tenemos que elegir entre ahorrar un 20% dandonos de hostias con todo el mundo o esperar a que baje de precio sola una tela, preferimos la segunda opcion.

  13. Leonighart

    Yo estoy indignado de que no haya habido, ni el blackfriday ni hoy cybermonday, apenas ofertas en lo que a componentes de gamma alta se refiere.

  14. JuslibolLord

    @lokewen

    lo de europa con matices, aquí el viernes por la mañana y jueves noche la gente se dio palos hasta en el carnet de conducir http://www.theguardian.com/business/2014/nov/28/black-friday-fever-police-battle-shoppers

    lo que esta claro es que es una mierda bastante anglosajona o de culturas de consumismo salvaje, que en sitios donde no somos tan de gastar (españa y zona mediterranea en general, alemania, francia y centro europa) no tiene tanto sentido en su configuración actual (siempre hemos sido mas de las rebajas del corte ingles con las viejas entrando efervescidas el dos de enero a comprar trapos)

  15. Lokewen

    @juslibollord

    Si quieres ver a viejas peleandose, regalales cosas, da igual lo que sea, se daran de palos hasta en el carnet de identidad.Pero si vamos a gastar, somos mucho mas comodos, claro que hay gente que se deja llevar, consumistas extremos los hay en todas partes, pero en cuanto a ventas, no te dara el mismo resultado aqui que en EEUU ni por asomo

  16. Ryszard

    @kencho dijo:

    @risarovi dijo:
    Tampoco buscaba nada especial, si acaso una tableta para estas navidades, pero la verdad tanto bombo para nada. Ya digo igual ha habido tiendas que sí, no lo he seguido tanto, pero lo que yo he visto… muy meh.

    Echa un ojo hoy. Esta mañana he tenido que quitar el spam de mi bandeja de entrada a paletadas de todo lo que me ha llegado por el Cyber Monday, de tiendas españolas y extranjeras. Y mismamente Amazon tiene rebajado hoy el Kindle, pero ha estado al precio habitual toda la semana, Black Friday inclusive.

    Gracias por el aviso, echaré un ojo.

    @borya89 dijo:
    @risarovi
    hombre, a este tipo de servicios de compra online sólo deberían acceder adultos o adolescentes bajo control parental, puedo entender que a un chaval de 15 años se le pueda ir la pinza, pero si eres adulto lo eres para todo y debes saber que el no dar un billete en mano no implica que lo estés perdiendo, es una cuestión de cultura y de educación.
    Yo con estas cosas hago cuentas y me marco un techo de gasto, es verdad que en ocasiones hay que tener fuerza de voluntad pero por eso no se les da tarjetas de crédito a niños.
    Este año sólo me compré Alien Isolation, un juego con apenas 2 meses por 20 pavos.

    Si si claro, sin duda. Pero creo que estamos de acuerdo que es más fácil darle a un botón y aflojar 50€ por uno/dos/x juegos en Amazon (o en cualquier lado), que ir al GAME (o cualquier tienda) y sacar un billete de 50€ y pagar con él. Jode más.

    Pero si, tienes toda la razón.

  17. darwinito

    En el tema de los videojuegos creo que hay que ser un poco estricto en tus hábitos. Si te compras un juego, te lo acabas. O al menos lo intentas al máximo, para evitar el estar dando bandazos entre juegos de forma inapetente.
    No evita que tengas compras de intocados en tu biblioteca, pero las disminuye bastante.
    Y prohibido «me pillo el fallout original que está a 2.99 y después no paso del minuto de juego». Eso engorda notablemente la biblioteca.

  18. SavageSteak

    El tema de acumular juegos pq si se soluciona mirando de vez en cuando la biblioteca de steam, ver cuantos te quedan por jugar (y no son de estos que vienen en humble que ni te interesan) y si estos son mas de 5-10, pasar de comprar mas. Cada semana hay ofertas en steam, cuando no un humble, y cuando no vienen las ofertas periodicas rollo navidad, verano, etc. Aunque no compres ese juego de oferta ahora, despues de pasarte los que te quedan por jugar, ese juego acabara rebajandose otra vez seguro. Y puede que incluso con una oferta mas jugosa.

  19. Vhaghar

    @tempano
    Pues yo considero que los juegos que compro sirven también para echar un cable a los estudios que los desarrollan, sobretodo en el ámbito indie, aunque no pueda jugarlos en el momento. Quizá es una manera de engañarme a mí mismo, pero verlo así hace que no me duela gastarme 5€, 10€ o 15€ y que luego, antes de poder jugarlo, se pueda encontrar el juego en bundle por 1€.

  20. RobertPaulson

    Sin animo de defender lo indefendible, pero a mi Steam, sus rebajas y la distribución digital en general me han traído muchas cosas buenas.

    Una historia personal: desde que estoy en Steam me gasto en juegos más o menos lo mismo al año , solo que en lugar de comprar tres títulos muy específicos en consola he ido acumulando un poco de todo en distintas tiendas: triple As, indies, juegos antiguos… Por el camino he descubierto un montón de joyas que de otra forma nunca habría catado, he conocido el maravilloso mundo de los mods y el pc gaming en general… todo ventajas oye.

    Es más, ahora comprar un juego full price, ya no es una putada derivada de un sistema super loco de distribución e impuestos, es casi una acción política: soy yo el que decide a dónde va mi dinero, así que me pienso mucho más a quién se lo doy y por qué.

    En definitiva, aunque estoy de acuerdo con que la distribución digital invita al consumismo como pocas cosas, a nada que seas un poco consciente de cómo consumes y a no ser que cambien mucho las cosas, Steam va a seguir siendo tu amigo. Y el de los desarrolladores. Paz y hamor para todos.

    TL;DR: De momento, Steam es tu amigo

  21. Tempano

    @gegrmova

    No conocía esto y es muy lo meyor. Faltan algunas cosas más a mi juicio para ser ya la estadística de la-penita.

    @yayo

    x) El virtual siempre es más canceroso. El hecho de no tener algo físico y perder esa acción de abrir la cartera, sacar 50 euros y pagar con ellos, hace que el dinero como tal pierda el valor que se le atribuye y tiene -imho-. Empezar a pagar todo lo posible con billetes, o dejar apartado dinero físico para destinarlo a fines virtuales, es algo que aconsejo a todo el mundo (parezco de la OCU ya).

    @vhaghar

    No, desde luego. Muchas veces yo también los compro por ayudar a los desarrolladores, pero la gran mayoría de compras no van a la ayuda y están más enfocadas a la «oferta»/locura consumista. Los Humble son también un arma de doble filo, y esto creo que lo comentó por aquí uno de los creadores de Teslagrad. Como tal funcionan muy bien; ayudan a los niños, a los desarrolladores y, además, consigues ahorrarte un dinero. Ahora viene el pero. Se crea una distorsión en lo que realmente vale el producto y lo que tu consideras que vale (incluso siendo un buen juego) y eso daña a los desarrolladores.

    Hay gente -por ejemplo en el Plus de PlayStation-, que decide no comprar «indies» porque total ya los regalarán. O esperar a ciertos Humble para pagar cuanto menos mejor. Luego piensan que han ayudado a los equipos, pero a lo mejor en el tiempo que el juego pasa de los 15 euros a los 6 euros dentro de un Bundle, el estudio se ha ido a la puta y cuando realmente necesitaba el dinero ya no lo tiene.

    Que a lo mejor me complico, pero creo que son muchísimas cosas a tener en cuenta en determinadas acciones/decisiones.