Las 11 peores tendencias de los videojuegos

Según Gamepro, claro. Lo cierto es que me parece una lista interesante y bien pensada. ¿qué «modas» o tenencias han acabado por hacer de este un mundillo más gris y cutristre? Según ellos los culpables son: 11- Las chicas perfectas. O cómo toda mujer que aparece en un videojuego debe estar mazizorra y saber empuñar todo tipo de armas. Algo así como las protas de las pelis de serie B, repetidas ad nauseam. Personalmente, creo que entre esto y la cutre realidad del cine español debe haber un punto intermedio. 10- Bloom lightining. Sin comentarios. 9- Supersoldados. Otro cliché de las películas de serie de cuarta B que hemos mimetizado. Ah, las grandes aportaciones del cine a los videojuegos ¿qué haríamos sin ellas? 8-  Soldados normales de toda la vida. Porque al parecer es la profesión más extendida en este mundillo. 7- Usar cada jodido botón del pad. Tienen toda la razón. Pero más que un defecto, digamos el uso contextual de los botones es uno de los mejores avances en materia de jugabilidad que ha habido desde que se inventó el stick analógico. 6- Música licenciada. Reconozcámoslo, las bandas sonoras más chulas nacen de los compositores de este mundillo. Y si no os lo creéis preguntárselo al ff8 y su Eyes on me cantada por Faye Wong. Urg. 5- Secuelas. Secuelas, y secuelas, y secuelas, y se… 4- El aumento de los precios de los juegos. Excepto por parte de FX interactive, la única compañía con algo de vergüenza torera en ese respecto. 3- Microtransacciones. O cobrar por cosas que antes eran gratis. 2- Ambientación gasta biatch. O cómo todos los juegos quieren ser de la calle, wei. Apuesto a que la mayoría de los programadores de este tipo de juegos la primera vez que vieron un negro fué en un documental sobre las gacelas del Serengueti. 1- Ambientación en la segunda guerra mundial. Que se nota que la memoria histórica de los yanquis sólo llega hasta esas fechas. COmo si la humanidad no hubiera tenido guerras para escoger una y hacer un juego, como por ejemplo la guerrra civ… er… mejor que me callo ¡Viva la segunda guerra mundial!